Médicos de Ourense amenazan con una huelga por la falta de personal

“Las urgencias están colapsadas por la falta de personal y no podemos ofrecer un servicio en condiciones de seguridad”. Con esta contundente afirmación e incluso con una amenaza de huelga y otras medidas de presión, la comisión de centro del Complejo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), ha denunciado “la situación insostenible” en la que se ha sumido el servicio de urgencias de la tercera ciudad de Galicia, tras la creación de una unidad de alta precoz en la que los pacientes son instalados hasta 72 horas para decidir si ingresan en planta o son devueltos a sus domicilios y a la que la gerencia derivó parte del personal médico que hasta entonces atendía exclusivamente las urgencias.

En su denuncia destacan que a pesar de haber aumentado el número de metros cuadrados en servicio y la actividad asistencial, la “insuficiente o ausente planificación y cobertura de los recursos humanos necesarios, basándose casi exclusivamente un cálculo estadístico que no se sostiene en la realidad” está provocando el caos. Desde la creación de esa unidad anexa de estancias temporales, se ha pasado de 34 a 25 médicos para todos los turnos, lo que supone una reducción de casi un 30% de la plantilla que asiste directamente al paciente que entra por la puerta.

Tras las primeras quejas, la comisión de centro se reunió con la dirección hospitalaria para negociar y buscar soluciones. Como respuesta aseguran haber recibido otro tijeretazo en el número de facultativos los fines de semana y festivos, aniquilando dos médicos más y la advertencia de que no se cubrirá ninguna baja o incidencia durante el período estival. El personal afirma que al haber menos facultativos para la atención directa de enfermos urgentes, los que se mantienen deben realizar más horas –una media de 190 horas mensuales por médico– y asumir carga laboral extra, lo que provoca “condiciones inadecuadas e inseguras” y un “incremento del riesgo de errores diagnósticos y terapéuticos” para los pacientes.

Los profesionales sanitarios ourensanos rechazan “esta política de recortes desproporcionados y desbocados” que achacan a las “ansias” de la gerente del hospital, Eloína Núñez, exconcejala del PP en el Ayuntamiento de la capital y prima del presidente de la Xunta de Galicia, para “hacer méritos en la carrera de ascenso político, más que una verdadera gestión eficaz y eficiente”. Además recuerdan el “nepotismo” que reina en el servicio de urgencias, dónde se creó una jefatura de sección que solo existe en el complejo ourensano y no en ningún otro hospital gallego, y que pasó a estar ocupada por el marido de la gerente.