Un juez imputa a Telefónica por un delito medioambiental en Nou Barris

El juzgado de instrucción 18 de Barcelona ha imputado a la empresa Telefónica por un delito medioambiental denunciado por los vecinos de Nou Barris. Los vecinos del barrio de la Prosperitat empezarán a declarar hoy sobre las molestias —ruido y vibraciones— que ocasiona un centro de datos que la compañía tiene en la calle Boada.

Los vecinos se quejan desde el 2009 de las molestias que ocasiona el local, que alberga varios generadores preparados para hacer frente a un posible corte del suministro eléctrico. Algunos de los cinco vecinos que se han presentado como acusación particular denuncian un “delito de lesiones” y aseguran sufrir “secuelas” por culpa de los ruidos y las vibraciones, según explicó ayer Lara Ferri, abogada de los denunciantes. También se presenta como acusación popular la Asociación de Vecinos de la Prosperitat.

La denuncia se interpuso en octubre de 2012 y la Fiscalía asumió las quejas vecinales y se sumó al caso. Además de tomar declaración a los vecinos, la juez ha citado también a los agentes de la Guardia Urbana que comprobaron las quejas de los vecinos y confirmaron el exceso de ruido.

Este local se tenía que destinar a equipamiento público, según el convenio que firmaron el Ayuntamiento de Barcelona y la empresa Telefónica en 2005 y que, gracias a una recalificación, permitía a la multinacional destinar su antigua sede de la Avenida Roma para construir viviendas de lujo.