Hacienda pagará los 1.700 millones del fondo de liquidez antes de fin de año

Tras unas cuantas disputas, incluidos supuestos malentendidos, entre el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, y el ministro Cristóbal Montoro a cuenta del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), las diferencias han llegado a su fin. El Ministerio de Hacienda acordó definitivamente con la Generalitat la ampliación del FLA para adecuarlo a los nuevos límites de déficit de 2013, que pasa de un 0,7% a un 1,58%. La Administración catalana se asegura así 1.700 millones de euros de liquidez que empezará a recibir antes de que concluya el año y que acabará de recibir a lo largo del próximo año. El acuerdo se enmarca dentro de los intentos del Gobierno y la Generalitat para rebajar la tensión que ha provocado el proceso soberanista.

Los flecos, “muy relevantes” según reconoció ayer el consejero catalán, están en la fecha concreta en que llegará ese manguerazo de liquidez a Cataluña, que se conocerá en los próximos días. El acuerdo no es baladí: parte de los proveedores a los que la Generalitat debe dinero cobrarán y, de esta forma, la Generalitat podrá reajustar su tesorería, ya que ahora estaba asumiendo algunas facturas que tenían que ser asumidas por el FLA. El gran cambio de posición que ha logrado Mas-Colell es la disposición de Hacienda a que esos recursos del fondo de rescate autonómico sirvan para pagar facturas de 2012 y que la Generalitat había pagado este año con su tesorería. Hacienda se negaba inicialmente a asumir esos gastos. Desencallar ese escollo era, según Mas-Colell, imprescindible para asumir las deudas pendientes con proveedores de la Generalitat.

La fecha definitiva de los pagos dependerá de lo que acuerden en próximas reuniones los técnicos de ambas administraciones. El Departamento de Economía y Conocimiento asegura que una vez empiece a recibir los recursos la Generalitat podrá pagar con “más normalidad”.

La liquidez de la Generalitat fue utilizada ayer por el consejero de Economía como uno de los argumentos para apoyar la independencia de Cataluña. Según aseguró Mas-Colell, uno de los beneficios sería "el dividendo fiscal", en referencia a lo que Cataluña se ahorraría en transferencia de recursos económicos al resto del Estado, el denominado déficit fiscal. El consejero aseguró que en el hipotético escenario de una Cataluña independiente “incluso podríamos bajar un poco los impuestos”. Fue su respuesta a la pregunta de un asistente a un acto sobre la viabilidad de una Cataluña independiente celebrado en Santa Coloma de Gramenet. El consejero reiteró que Cataluña es viable desde el punto de vista económico: “Se sustenta sola sin dificultad”.