“Una biblioteca es como una farmacia, con remedios para todo mal”
"Yo perseguiría penalmente a todo el que se descargue algo", dice el autor
El filósofo y escritor Fernando Savater (San Sebastián, 1947) considera que el remedio contra todo mal es la educación, la reflexión y la cultura, algo que hay que cuidar por encima de todo, y por ello acaba de escribir Figuraciones mías (Ariel), un libro misceláneo y una declaración de amor sobre el gozo de leer y pensar. "Una biblioteca es como una farmacia en la que hay remedios contra todo tipo de enfermedades. Te permite conocerte a ti mismo y buscar los remedios", explica en una entrevista.
Por ello, ha intentado, precisamente, incluir en su nuevo trabajo todo tipo de referencias, con la cultura como eje central. La filosofía, el papel de la educación, los escritores, sus lecturas preferidas, el cómic, el uso de Internet, la piratería o la defensa de la propiedad intelectual son algunas de las cuestiones que el autor trata en estos textos, que conforman un libro lleno de reflexiones.
"Los países que están saliendo o han salido antes de la crisis son los países que más han invertido en educación, y, casualmente, los que seguimos braceando y estamos en la cola por salir, como España, Grecia o Portugal, son los que menos invierten en educación. Esto será por algo, no es casual, ¿no?", se pregunta el escritor vasco, que se declara un empedernido lector.
También ha querido reivindicar el artículo y el ensayo. "No tengo blog ni Twitter; sigo escribiendo igual en el periódico, y creo que los que lo hacemos así tenemos un elemento de responsabilidad y autocontrol que no se tienen en esos medios de Internet", añade.
Savater hace una encendida defensa del derecho a la propiedad intelectual. "Las cosas van cambiando, y no creo que mucha gente piense que esto es inocuo para la cultura. Pero es increíble la impunidad. Yo perseguiría penalmente no solo a los de las grandes páginas o empresas, sino a todo el que se descargue algo. Hay que regularlo de una manera moderna, porque la ley es mala". "Todo el mundo querría entrar a El Corte Inglés, por ejemplo, y que les dieran las cosas gratis, pero todo el mundo sabe que esto sería catastrófico: por eso hay que regular los contenidos", reclama.
Sobre la filosofía y la tendencia a recortar en Humanidades, Savater lamenta que sea una mala práctica que se viene haciendo desde hace tiempo. "Me preocupan cosas concretas, como el mantenimiento de la religión como un asignatura normal, la desaparición de Educación para la Ciudadanía y la minusvaloración de la filosofía, algo terrible porque la filosofía está ligada a la democracia", añade.
Pero tiene comentarios para todos; también para los que critican al ministro de Educación, José Ignacio Wert, y están a favor de la inmersión lingüística: "No me creo que los que critican al ministro por los temas que hemos hablado, entre lo que me incluyo, les parezca bien la inmersión lingüística, porque es toda una agresión a la educación pública y laica, que se basa en la cultura común dentro del país". "Se puede exigir una buena Administración que optimice los recursos, pero el gasto en educación no es un gasto: se trata de una inversión en el futuro", apostilla.
En el libro, el escritor también habla del derecho a decidir. "Cataluña es una democracia, y el derecho a decidir es como el derecho a llevar zapatos", advierte. "Obviamente, todos tenemos derecho a decidir, pero en Cataluña se llama derecho a decidir a decidir que no decidan los demás. Yo tengo tanto derecho a decidir lo que afecta a Cataluña como lo que no. Somos una ciudadanía, y todos tenemos derechos, salvo que queramos cambiar las reglas de juego", concluye.
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