La dotación de la renta mínima crece de los 100 millones actuales a 173

Pese a la caída global del gasto social, el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell insistió ayer en que aumenta su peso sobre el total. El argumento se explica por el incremento de las becas comedor (1,8 millones más), las ayudas a las familias en el capítulo de vivienda (7,5 millones ), pero sobre todo por el salto que protagoniza la partida del Departamento de Empresa y Empleo para la Renta Mínima de Inserción (RMI): la dotación pasa de 100 millones de euros a 173.

Se recupera así el presupuesto de 2011 —año en que se produjo la polémica revisión que dejó sin la ayuda a miles de personas—, pero no se prevé llegar al mismo nivel en cuanto a los beneficiarios. A finales de este septiembre había 22.666 expedientes activos, que corresponde a 55.442 beneficiarios. La memoria de los Presupuestos de 2014 prevé llegar acabar el presente año con 24.000 expedientes y subir ligeramente hasta los 25.000 el año que viene. Muy lejos, de los 30.000 que había en 2011.

Pero la realidad es que el gasto en políticas sociales caerá de nuevo, situándonse en 1.786 millones, un 10,5% menos que hace dos años. Bajan todos los apartados (ayudas a la dependencia, las familias, la inmigración, la infancia...), excepto las destinadas a la inclusión social y a la lucha contra la pobreza, que gana dos ínfimos millones desde 2012 y se fija en los 192,6 millones.

Este descenso del gasto se traduce en la previsión de perder 4.500 beneficiarios por la ley de la Dependencia, que quedarían en 93.755. Además, se contempla una reducción de hasta el 4% de las plazas de residencia y centros de día destinados a discapacitados. Por el contrario, y rompiendo la tendencia descendente, destaca el fuerte aumento previsto, del 30%, de los beneficiarios de prestaciones destinadas a jóvenes tutelados y al acogimiento de menores.