Iglesias ve una oportunidad la marcha del talento español joven a Sudamérica

El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, ha considerado hoy una "oportunidad" tanto para España como para América Latina el "importante" movimiento migratorio de talento joven español que se está registrando en este momento hacia Sudamérica. Iglesias ha explicado que este flujo de "miles de muchachos" supone para Latinoamericana disponer de capital humano, mientras que para España significa mantener la "vinculación" con países emergentes económicamente y que apenas han sufrido los efectos de la crisis.

Este economista, político y escritor uruguayo, de origen español, que también fue presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (1988-2005), ha pronunciado una conferencia en Bilbao invitado por la Universidad de Deusto.

En su intervención y posterior coloquio, ha indicado que América Latina cuenta con una gran reserva de materias primas, pero ha precisado que esta circunstancia no es suficiente para lograr desarrollo y salarios de calidad.

"Hay que dar un paso adelante en innovación, exportación e industria, y en este marco se ubica la ventaja de poder colaborar con España y Portugal, con quienes compartimos lengua y cultura", ha dicho. En este punto, ha destacado la gran importancia del movimiento de talento español joven hacia América Latina y ha afirmado que "si se avanza en este campo y se crea un espacio laboral compartido, será beneficioso para ambas partes".

"América Latina es una gran posibilidad para España", ha dicho en la conferencia

"América Latina es una gran posibilidad para España. Ya somos socios, pero hay campo para más por contactos humanos y culturas compartidas. Todo esto hay que vigorizarlo -ha subrayado- cara al mundo duro y competitivo que viene".

Sobre la situación actual de los países sudamericanos, Iglesias, quien también ejerció de ministro de Asuntos Exteriores uruguayo (1985-1988), ha resaltado que "la década pasada fue una década ganada", pero ha matizado que aunque "parece la tierra prometida, no lo es".

Se ha mostrado optimista, no obstante, respecto al futuro de la zona siempre y cuando se "mantenga la disciplina en materia macroeconómica, el mercado de China no se venga abajo y se acometan reformas pendientes, como las educativas, sociales, de productividad, de Estado y del mercado interno de la zona"