La Comunidad apuesta por la rebaja fiscal
González acomete la mayor bajada de impuestos de una autonomía ante la presentación de los presupuestos de 2014, que serán similares a los de este año
La nueva batería de rebajas fiscales de la Comunidad de Madrid supondrá un ahorro de 1.110 euros de media por contribuyente, según el Ejecutivo de Ignacio González. Eso no significa que la bajada de impuestos beneficie a todos los madrileños por igual. Por ejemplo, si usted tiene una base imponible de 35.000 euros, a partir del 1 de enero de 2014 se ahorrará 140 euros en el tramo autonómico del IRPF. Si son 60.000 euros, esa cantidad serán 240 euros. Solo por este concepto: el Gobierno regional anunció ayer además la revisión, a la baja, del impuesto de transmisiones patrimoniales y del de actos jurídicos documentados. Fue la carta de presentación de unos presupuestos que se conocerán hoy y serán similares a los de este ejercicio.
También eximirá del céntimo sanitario en los combustibles a los 65.000 profesionales del transporte que hay en la región. Principalmente, taxistas y camioneros. La aplicación de las últimas novedades políticas fiscales supondrán un ahorro para los madrileños de 357 millones de euros de acuerdo con los números del Gobierno regional: 216 millones del IRPF, 76 millones del impuesto de transmisiones patrimoniales, 50 del impuesto de actos jurídicos documentados y 15 de la supresión del céntimo sanitario.
Las medidas fiscales que la Comunidad adoptará el ejercicio que viene son las últimas de una forma de entender la política, de ideología marcadamente liberal, en la que subir impuestos suena a herejía. Otra cosa son las tasas (que cubren el coste de un servicio determinado), que han experimentado aumentos notables (un 65% desde el año pasado en el caso de las universitarias) y de las que incluso se crearon nuevas clases en 2012, cuando la Comunidad recortó a mitad de ejercicio 1.045 millones tras la caída a pique de sus ingresos a finales del año anterior.
Dirigido por Esperanza Aguirre, no por casualidad Madrid fue la primera región en rebajar un punto el tramo autonómico del IRPF, progresivo frente al modo lineal anunciado ayer por González. O las deducciones en el IRPF de hasta 900 euros por el nacimiento o adopción de hijos, la más alta de todas las autonomías. En este campo, también existe la deducción por arrendamiento a menores de 35 años, que les permite deducir el 20% de las cantidades que destinan al alquiler hasta un tope de 840 euros. Eso, sin descontar la bonificación al 99% de la tributación en el impuesto de donaciones y sucesiones —en el primer semestre de 2004 se recaudaron 273 millones; en los seis meses de este año la recaudación subió a 550 millones— o la exención total del impuesto de Patrimonio frente a su aplicación en el resto del país. En Madrid tributan el 15,9% de los contribuyentes totales del IRPF, seis décimas por debajo de Andalucía (PSOE e IU) y 2,1 por detrás de Cataluña (CiU). El escenario cambia radicalmente si se tienen en cuenta las rentas por encima de los 150.000 euros, con un 39% tributando en la región por el 24% en la comunidad catalana.
Volviendo a la última serie de medidas fiscales aprobadas por el Ejecutivo autonómico hará, en el caso de un matrimonio con un hijo de cinco años donde solo trabaje uno de los cónyuges por 20.000 euros netos al año, que no paguen por IRPF 38,5 euros respecto a la tarifa regional actual. Esa cifra será de 143,28 euros si los dos miembros del matrimonio —con dos hijos de menos de cinco años— tienen trabajo, con unos rendimientos netos entre ambos de 50.000 euros. Si, por el contrario, es usted un soltero de 33 años que se ha dado de alta en el censo de empresarios y que durante el ejercicio en que lo hizo percibe 14.000 euros netos, no pagará nada por la cuota líquida autonómica. Es más: se ahorrará 562 euros respecto a Castilla-La Mancha (PP), también gobernada por el Partido Popular, 762 respecto a Extremadura (PP con el apoyo de IU), 1.026 respecto a La Rioja (PP) y 1.062 euros en comparación con el resto de autonomías.
Continuando con los ejemplos, una pareja de madrileños de 34 años que perciban 14.500 euros netos cada uno y paguen 700 euros al mes de alquiler tampoco pagará nada según la cuota líquida regional que González adelantó antes de presentar hoy los presupuestos regionales para 2014. Una pareja que tribute con las mismas características en Cataluña desembolsará en su lugar más de 1.800 euros.
Centrándonos en las transmisiones patrimoniales —-que grava la compra de pisos de segunda mano—, y tiene el tipo general más bajo de España con un 6%, pagará 9.000 euros por la compra de una vivienda de segunda mano en la región valorada en 150.000 euros. Al cambio, 1.500 euros menos de lo que haría ahora y muy por debajo de los 15.000 euros que debería desembolsar en Cataluña, Valencia (PP) o Galicia (PP). De comprar una vivienda nueva estimada también en 150.000 euros, por el impuesto de actos jurídicos documentados, que afecta a los documentos notariales e hipotecarios de obra nueva, abonaría 1.125 euros. Esto es, 375 euros con la nueva rebaja del 25% aplicada por la Comunidad, dejándolo en el 0,75%. El mismo caso, trasladado a Barcelona, supondría un coste de 2.250 euros. El doble que en Madrid.
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