Industria desoyó las peticiones de información de Alcanar

El Ayuntamiento de Alcanar (Tarragona) está molesto con el Ministerio de Industria, Energía y Turismo por la gestión que está realizado con la crisis sísmica en el entorno del almacén de gas Castor, ubicado a una veintena de kilómetros de la costa de esta localidad y Vinaròs (Castellón). Los requiebros del alcalde de Alcanar, Alfons Montserrat (ERC), se centran en denunciar la falta de información recibida por parte del Gobierno sobre los 565 terremotos ocurridos desde principios de septiembre. En especial, el Ayuntamiento de esta localidad considera un agravio no haber sido invitado a la reunión convocada en Madrid por el Ministrio de Industria, José Manuel Soria, el pasado 7 de octubre.

A la cita acudieron representantes del Gobierno, el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, el presidente de la Diputación de Castellón, Javier Moliner, y los alcaldes de las localidades valencianas de Benicarló, Peñíscola y Vinaròs, todos del PP. Por parte de Cataluña, el Ministerio convocó al consejero de Interior de la Generalitat, Ramon Espadaler, y al vicepresidente de la Diputación de Tarragona, Josep María Cruset. Pero no emplazaron a la cumbre a los alcaldes de las Tierras del Ebro, afectados por los temblores. Y ello a pesar de que el Consistorio de Alcanar pidió formalmente información y una reunión en Madrid a través de correo electrónico y postal. Soria explicó ayer en el Congreso que se citó a la reunión en Industria a todos los alcaldes que había solicitado ser escuchados.

Por esta razón desde el Ayuntamiento han difundido este jueves las pruebas para demostrar que el Ejecutivo desoyó sus requerimientos. Según la documentación facilitada, el 30 de septiembre, en plena crisis sísmica, enviaron una misiva a la Secretaría General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, dependiente del Ministerio de Industria. “Nos dirigimos a usted en relación con la alarma ciudadana creada ante los continuos microseísmos que se están produciendo a raíz de los trabajos de inyección de gas en cavidad marina del proyecto Castor de almacenamiento de gas natural”, empezaba la carta enviada al secretario general del organismo. “Como ya sabrá, la continuidad y magnitud creciente de los seísmos ha obligado a que el Ministerio haya ordenado el cese inmediato de los trabajos de inyección en la planta marítima. Dicho cese hace suponer que no se tomaron en su día las medidas oportunas para prever los movimientos sísmicos, o que la empresa promotora no presentó los informes necesarios para garantizar la seguridad de las instalaciones y, por extensión, de los municipios más próximos, como es el caso del municipio de Alcanar (sur de Tarragona)”, continuaba el documento firmado por Montserrat. Y concluía: “Ante la absoluta falta de información recibida por parte de la empresa promotora ESCAL UGS, así como por parte de las administraciones correspondientes, solicitamos mantener una entrevista a la mayor brevedad posible, en la que asistiriamos representantes de este ayuntamiento, así como de le Plataforma Ciutadana en Defensa de les Terres del Sénia”.

La petición cayó en saco roto y no fue contestada, denuncia el Consistorio. Por ello, volvieron a intentarlo vía correo electrónico el 2 de octubre con la Secretaría de Energía del Gobierno. “De acuerdo con la conversación telefónica con la Secretaría General de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa, para mantener una entrevista urgente por parte del alcalde de Alcanar con el Secretario General de Energía, nos han dirigido a esta administración. La entrevista surge como consecuencia de la oleada de seísmos que se están produciendo por los recientes trabajos de inyección del proyecto Castor, que han creado una importante preocupación ciudadana. Por proximidad a las instalaciones, adjuntamos Carta (que en principio habíamos enviado a la Secretaria General de Industria) solicitando dicha reunión urgente”. Tampoco en esta ocasión las peticiones dieron su fruto, denuncia el Consistorio de las Tierras del Ebro. De esta manera, el concejal no pudo acudir a la cumbre organizada por Soria unos días después. “Estamos acostumbrados a esta manera de proceder, desde que surgió el proyecto en 2007 y lo rechazamos, nos han mantenido apartados”, afirmó Montserrat.

Ante las quejas y el escándalo desatado, la delegada del Gobierno en Cataluña, María de los Llanos de Luna, emplazó a los alcaldes de la comarca del Montsià a un encuentro, celebrado en Barcelona el 8 de octubre.