La oposición reprocha a Fabra su pobre negociación de presupuestos con Rajoy

La oposición volvió a cebarse con la debilidad política del presidente Alberto Fabra nada más conocer el recorte de inversiones previsto en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2014 que ha confeccionado el Gobierno de Mariano Rajoy. La inversión del Estado se reducirá por tercer año consecutivo —un 8,1%— y el gasto por valenciano se sitúa a la cola de España.

Un recorte inversor que se añade a la reciente derrota que supuso la retirada de la reforma del Estatut d’Autonomia y a la deuda histórica que arrastran los valencianos por un modelo de financiación deficitario. La oposición en bloque achacó el retroceso en las cuentas a la falta de liderazgo de Fabra.

Son unos presupuestos injustos, calificó el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que ayer participó en Alicante en un acto de apoyo al corredor mediterráneo. Según el político, desde que Rajoy llegó a la Moncloa “el PP da un palo tras otro a los valencianos”. Ximo Puig, líder del PSPV, los considera los peores de la última década. “No puede ser que sistemáticamente nos maltraten”, se lamentó Puig, quien responsabilizó de esta marginación a Fabra. “Se muestra incapaz de levantar la voz ante el presidente del Gobierno”.

La coordinador de EUPV, Marga Sanz, se pronunció en parecido sentido. “Estamos en el furgón de cola de la inversión estatal y ante un Consell, que es incapaz de convencer al Gobierno del señor Rajoy”, criticó. La dirigente recalcó que han sido unas pobres negociaciones, ya que las cuentas del Estado dejan a los valencianos con una inversión por debajo de la media española.

La inversión del Estado en Valencia se reduce en 212 millones desde 2011

Fabra se blindó ante las críticas, que soporta desde hace días. “Se trata de unos presupuestos realistas y austeros, pero que cubren las cuestiones básicas de los valencianos”, arguyó el presidente. Fabra anunció la presentación de enmiendas, aunque el margen de maniobra para variar las partidas, es, como sucedió el año pasado, muy estrecho. “Desde luego a todos nos gustaría más y a la Comunidad Valenciana, como cualquier otro territorio, también”, reconoció el presidente.

En el cap i casal, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y su número dos, Alfonso Grau, evitaron a toda costa criticar al Gobierno de Rajoy pese a que Valencia pierde unos 18 millones de euros, denunció el socialista Joan Calabuig. La asignación a la capital pasa de 163 millones a 145,3, calcula el principal grupo de la oposición. Pese a todo, Grau se mostró satisfecho y disculpó el desplome del 60% de la inversión del Estado en la capital respecto a 2011, últimos presupuestos del gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero. “La ciudad de Valencia no ha recibido jamás 357 millones de euros, ahí se incluía el AVE y ya se ha hecho”, justificó.

Barberá, una de las dirigentes con hilo directo con Rajoy, también eludió valorar el recorte y se limitó a destacar como inversión estrella los cuatro millones de euros para el soterramiento de las vías de Serrería. Una partida, por otro lado, que solo da para la elaboración de estudios y que no se extiende a posteriores ejercicios presupuestarios, precisó el socialista Calabuig. En el proyecto de presupuestos tampoco hay ayudas para el contrato programa de transporte, pese a que Madrid recibe 127 millones, Barcelona, 95 y Canarias, 25. Con el Palau de les Arts sucede parecido: en 2011, el gobierno de Zapatero destinó 1,1 millones de euros al auditorio y en 2014 solo se han consignado unos 400.000 euros. “Barberá acabará este mandato sin acabar ninguna obra estratégica para Valencia”, sentenció.

El presidente y la alcaldesa defienden las cuentas generales del Estado

Desde Compromís lamentaron que Barberá sea incapaz de reivindicar al Gobierno las inversiones que le corresponden a la ciudad. “Exigimos a Barberá que se plante ante Rajoy por marginar a los valencianos, y si no lo hace, que deje paso a un otra persona que defienda verdaderamente los intereses valencianos”, manifestó la edil Consol Castillo.

La Confederación Empresarial Valenciana (CEV) criticó la “brecha” de 4,5 puntos entre los que ha asignado el Gobierno (un 6,2%) del total y el peso poblacional de la comunidad autónoma, del 10,7%. La patronal provincial mantiene que a esa diferencia “hay que añadir la infrafinanciación” que sufren los valencianos “de forma continuada” en ingresos y gastos corrientes. La confederación lamenta que la Comunidad se sitúe “un año más” a la “cola del ranking autonómico” en la distribución territorial de las inversiones reales.

Destaca la organización, no obstante, que la partida de infraestructuras "garantiza la ejecución del tercer carril" del corredor mediterráneo y reconoce que los PGE “se basan en un cuadro macroeconómico realista”. Del incremento de la carga fiscal, la CEV apunta que "no es compatible con las necesidades y las posibilidades del sector productivo", y advierte del desfase entre las cotizaciones de trabajadores y empresas a la formación profesional para el empleo y el retorno posterior. Piden transparencia.