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El Museo Balenciaga se replantea su futuro sin Arzalluz y víctima de la crisis

La conservadora y otros miembros del centro dejan el proyecto

La hasta ahora conservadora del Museo Balenciaga, Miren Arzalluz, posa junto a unos maniquíes en una imagen de archivo.
La hasta ahora conservadora del Museo Balenciaga, Miren Arzalluz, posa junto a unos maniquíes en una imagen de archivo.JESÚS URIARTE

El Museo Balenciaga no atraviesa un momento dulce. El centro no es ajeno a la crisis y a sus consecuencias, un escenario que se repite en muchos otros de los principales proyectos culturales de Euskadi. Las aportaciones de las principales instituciones que componen el patronato (Ministerio de Cultura, Gobierno vasco y Diputación de Gipuzkoa), han caído un 37%, si se comparan los presupuestos de 2013 con las del año anterior, cuando las subvenciones para gastos de funcionamiento ascendieron a 1,5 millones, frente a los 942.000 euros de ahora.

La situación ha provocado la apertura de un periodo de reflexión, según varias fuentes consultadas próximas al museo. A lo que se suma la resolución de varios miembros del centro ligados fuertemente al proyecto y rostros imprescindibles del mismo, entre ellos, Miren Arzalluz, de dejarlo. La conservadora confirmó a este periódico su decisión, pero prefirió no explicar las razones que le han llevado a dar este paso.

El momento para el Museo es delicado, tras poco más de dos años abierto al público —se inauguró en junio de 2011—, y después de un periodo mucho más complicado a cuenta de las supuestas irregularidades cometidas por el exalcalde de Getaria, Mariano Camio (PNV), y el arquitecto cubano Julián Argilagos. Ambos están acusados, entre otros delitos, de falsificación de documentos, administración desleal y apropiación indebida de fondos públicos.

El patronato tiene prevista una reunión para finales de mes, en la que en un principio las instituciones, que este año no han destinado ninguna cantidad a la adquisición de colecciones frente a los 400.000 euros de 2012, deben abordar qué futuro quieren para Balenciaga.

Algunas de las fuentes consultadas hablan de un replanteamiento del proyecto que puede incluir un debate sobre los periodos de apertura del centro, es decir, la posibilidad de cerrar el Museo en determinadas épocas del año.

Pese a la estrechez económica las cifras de visitantes vienen a respaldar un proyecto considerado único en el mundo, el de un museo dedicado a la figura del modisto Cristóbal Balenciaga maestro de los grandes diseñadores, referente internacional indiscutible en el mundo de la moda.

68.232 personas visitaron el centro en 2012, según los datos que se recogen en la página web del museo, lo que supone una media de casi 187 personas al día. Este verano, entre los meses de junio, julio y agosto, el Museo ha recibido 19.450 visitas, más de 200 al día.

El Museo, que contó con una inversión pública total de 30 millones para su puesta en marcha tras 12 años de trabajos, cuenta con unos fondos de más de 1.200 piezas del modisto de Getaria, y a su colección permanente, de la que se exponen alrededor de 70 vestidos que se renuevan cada año, le han acompañado otra serie de iniciativas con el objetivo de multiplicar las posibilidades del centro y diversificar su oferta. Exposiciones temporales, talleres, cursos y conciertos, entre otras, han sido algunas de las propuestas desarrolladas por el director del Museo, Javier González de Durana, y su equipo.

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