Medalla de oro a la valentía y el olfato
Premiado un perro de la Guardia Civil que ayudó a desactivar un explosivo de ETA en 2009 Es la primera vez que lo recibe un perro español y la segunda vez que sale del Reino Unido
El 30 julio de 2009, el sargento de la Guardia Civil Juan Carlos Alabarces y su perro Ajax buscaban desesperadamente en la localidad de Palmanova (Palma de Mallorca) un segundo explosivo de la banda terrorista ETA. El primero había explotado horas antes en las inmediaciones del cuartel del instituto armado de esta localidad, al suroeste de la isla, y había matado a los agentes Carlos Sáenz de Tejada, de 28 años, y Diego Salva, de 27.
La segunda bomba lapa resultó estar adosada a los bajos de un todoterreno Nissan Patrol en desuso de la Guardia Civil, estacionado también en las proximidades de otro cuartel. Pero gracias a este pastor alemán, entrenado en la búsqueda y detección de artefactos explosivos, el Grupo Especialista en Desactivación de Explosivos del instituto armado pudo localizar la bomba y hacerla explotar de forma controlada evitando, de este modo, que hubiera más víctimas.
Su providencial olfato le ha valido ahora para ser condecorado con la medalla de oro a la valentía que concede la organización benéfica People's Dispensary for Sick Animals (PDSA). Y que solo 21 perros en todo el mundo tienen. Según informa la Guardia Civil en un comunicado, Ajax es el primer can de España y el segundo fuera de Reino Unido en recibir dicho galardón; el máximo honor que se puede entregar a un animal por un acto de valor destacado o por una dedicación excepcional al deber y compromiso social y que es el equivalente del mundo animal a la Cruz de San Jorge de Reino Unido, que reconoce actos de valentía realizados por civiles.
La medalla le ha sido entregada esta mañana en el Teatro del Bosque, de Móstoles, por una delegación de la PDSA Foundation, en el marco de la celebración de las IV Jornadas Policiales y Militares Internacionales de Guías Caninos. Tal vez uno de los últimos actos oficiales de este perro, a punto de jubilarse: Ajax tiene 13 años perrunos. Es decir, 104 años humanos. Una larga, larguísima trayectoria, que le ha llevado a servir en la Casa Real —donde estaba en el momento del atentado que evitó con sus longevos 100 años— y ahora en presidencia del Gobierno, donde se dedica a labores de reconocimiento de terreno.
Estos perros son formados durante nueve meses en la escuela de adiestramiento que el instituto armado tiene en el Pardo. Ahí, además de obediencia aprenden su especialidad: drogas, explosivos o seguridad y rescate de personas, según explica Abimelec Herrero, cabo de la Guardia Civil destinado en esta escuela. Ahora, muchos de sus compañeros tendrán un hocico en el que sentirse reflejados.
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