Aumenta el número de detenidos por tener a empleados sin contrato
La inspección descubre a un empresario en Crevillent que tenía 13 empleados sin contrato
La crisis y las precarias condiciones laborales han dado alas a la economía sumergida. Cada semana hay noticias nuevas de operaciones que dan cuenta de la detención de empresarios que tenían en sus fábricas a trabajadores sin contrato laboral. Y la mayoría de casos se circunscriben al sector del calzado.
La Consejería de Gobernación informó este lunes de la detención del responsable de una fábrica de calzado en Crevillent que tenía a 13 empleados sin contrato. La firma tampoco tenía licencia de actividad y no realizaba el adecuado tratamiento de residuos tóxicos, que vertía a un descampado.
Pero no se trata de un caso aislado, el viernes pasado la Policía Nacional informó de la detención de la administradora y el encargo de otra fábrica de calzado ubicada en Pinoso (Alicante) que tenía a 26 trabajadores sin contrato. La empresa, según la Policía, destinaba a uno de estos empleados a vigilar en turno de 24 horas al día los accesos para evitar inspecciones y controles. Los 26 operarios fueron detenidos e identificados en una espectacular operación policial, en la que se confirmó que ninguno de ellos estaba dado de alta en la Seguridad Social.
Estas dos operaciones recientes se suman a la efectuada a finales de enero en otras dos fábricas de calzado en Pinoso y Aspe en las que solo tres de los 39 empleados estaban contratados.
El secretario general de UGT en Alicante, Óscar Llopis, recordó que la provincia es la tercera, por detrás solo de Barcelona y Madrid, en economía sumergida. “Estas operaciones demuestran que hay empresarios sin escrúpulos dispuestos a ganar dinero a costa de los trabajadores”, dijo Llopis, que lamentó el “fraude económico” que están cometiendo estas empresas.
Pese a la cruda realidad de la crisis económica “lo que no se puede consentir es que al final cale en la sociedad que la economía sumergida es el mal menor, y que más vale hacer algo, aunque sea sin contrato, que no trabajar en nada”, se quejó Llopis.
Pascual Pascual, delegado de CC OO en la comarca del Baix Vinalopó, tildó de “desaprensivos” a estos empresarios que “juegan con las necesidades humanas”. Para CC OO hay empresarios que prefieren pagar “en negro los salarios y arriesgarse a ser descubiertos”. Los sindicatos mayoritarios exigen a la Administración que refuerce los servicios de inspección para atajar la economía sumergida.
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