Los asesores de Mas abogan por los ‘minijobs’ para luchar contra la economía sumergida

Los asesores económicos de Artur Mas se unieron ayer a las voces que reclaman la implantación de los minijobs, contratos laborales con sueldos inferiores al salario mínimo interprofesional como los existentes en Alemania, para luchar contra el paro y la economía sumergida. La medida está dentro de un documento que el Consejo Asesor para la Reactivación Económica y el Crecimiento (CAREC) entregó ayer al Gobierno catalán y que comprende una batería mucho más amplia de medidas para aplicar a corto plazo, que pasan desde la simplificación de los trámites administrativos hasta algunos incentivos al consumo y la inversión.

Dentro de ese paquete de recomendaciones, el consejo que preside Salvador Alemany sugiere varias referidas al mercado laboral. Entre ellas está el fomento del trabajo parcial a través de dos vías: la primera, la reducción de jornadas para determinados perfiles profesionales, “habitualmente” personas en “fase avanzada” de su “vida laboral y profesional”. La vacante sería cubierta, según el informe, sin que se incrementara la masa salarial. La segunda fórmula pasa por los minijobs, los contratos instaurados por el canciller alemán Gerhard Schröder y cuya remuneración máxima es de 450 euros mensuales. Se estima que siete millones de personas están empleadas en Alemania a través de este contrato.

No obstante, el propio CAREC señala que los minijobs deberían implantarse con “limitaciones y condicionantes”. Si bien los asesores de Mas recuerdan que el Banco Central Europeo (BCE) ha recomendado a España que introduzca esos contratos dentro de la legislación estatal, el CAREC recuerda la fiscalidad y la Seguridad Social de los minijobs “estarían subvencionados” por el resto de los contribuyentes. Y además, añade el documento, la remuneración estaría “por debajo del umbral de la pobreza”, por lo que debería “limitarse necesariamente en el tiempo”.

El primero en sugerir la introducción de los minijobs en España fue el presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, que los expuso como una fórmula para luchar contra el paro juvenil. Ayer el colectivo de jóvenes Avalot, de UGT, cargó contra esa propuesta al considerar que solo sirve para “trabajar más y cobrar menos”.

Artur Mas apuesta por fomentar los contratos a tiempo parcial

El documento de propuestas del CAREC apunta que los minijobs permitirían que los jóvenes pudieran hallar empleo una vez se recuperara el mercado laboral, puesto que una de las finalidades de esos contratos a bajo precio es precisamente que adquieran experiencia laboral. Otro de los objetivos que persigue la propuesta, según el informe, es “reconducir, ni que sea en parte, la economía sumergida”. Una vez resuelta la crisis económica, concluye el informe, esos contratos deberían irse normalizándose y homologándose con el resto.

De las dos fórmulas que propone el CAREC, el presidente de la Generalitat, Artur Mas abogó ayer por potenciar los contratos a tiempo parcial. “Creo que a diferencia de otros países europeos que tienen mucho menos paro, lo que nos falta es mucho trabajo a tiempo parcial”, afirmó en una conferencia en París Mas, quien agregó que “no es lo mismo un minijob, trabajar todo el día por poco dinero, que trabajar menos horas por menos dinero”, informa Miquel Noguer.

El documento pone encima de la mesa otras medidas para fomentar el empleo: la posibilidad de darse de alta como autónomo a tiempo parcial, ampliar los supuestos para capitalizar el 100% de la prestación de desempleo —ahora solo pueden hacerlo menores de 30 años—, o crear exenciones fiscales para empresas nuevas.

El CAREC sugiere extender concesiones a cambio de inversión

Como novedad respecto a documentos anteriores, el CAREC esta vez también estudia los incentivos financieros para estimular el consumo y la inversión a corto plazo, partiendo de la base de que otro “plan E” no es posible porque supuso una inversión “muy importante” de recursos económicos con un “impacto muy reducido” en el tejido empresarial y el empleo.

Frente a esa fórmula de gasto, el CAREC propone medidas cuya inversión luego se recupere a través de la recaudación. Los expertos ponen como ejemplo el Plan PIVE del sector de la automoción que, recuerdan, genera 2,4 euros en IVA e impuesto de Matriculación por cada euro que invierte la Administración. El consejo pone como condición que la ayuda sea legal y propone como sectores receptores de esas ayudas la obra civil, la eficiencia energética y la rehabilitación de viviendas. Para estimular la inversión, el CAREC propone también extender el plazo de concesiones de infraestructuras a cambio de que las empresas que gozan de ese contrato adelantes sus inversiones, siguiendo el modelo francés.

Retomando un documento anterior, el consejo asesor propone medidas para fomentar otro tipo de financiación, más allá del que ofrecen las entidades bancarias, en especial de fondos de capital riesgo y business angels, así como un mercado alternativo de emisiones de renta fija (pagarés y bonos) para pymes.