Amnistía Internacional elabora una “hoja de ruta” tras el fin de ETA

Amnistía Internacional ha remitido a varios partidos una “hoja de ruta” tras el anuncio de ETA del fin de la actividad armada. Un documento, como ha explicado el delegado del organismo en España, Estaban Beltrán, que plantea cambios en el código penal, la ley de partidos y acciones contra la tortura. Beltrán se ha entrevistado esta mañana en Vitoria la presidenta del Parlamento vasco, Bakartxo Tejería, y con representantes de las formaciones con representación en la Cámara, a las que ha entregado el dossier. La asociación también ha mantenido un encuentro esta tarde con el lehendakari, Iñigo Urkullu.

Beltrán ha apuntado que uno de los objetivos de Amnistía Internacional es trabajar por el “fin de la impunidad”, investigando todos los crímenes de ETA impunes y las supuestas violaciones de derechos humanos cometidas por las fuerzas de seguridad. Beltrán ha propuesto que en el análisis del decreto sobre víctimas de violencia de motivación política que está elaborando el Gobierno vasco se valore la introducción de personas que hayan podido sufrir torturas.

“Verdad, justicia, reconocimiento y reparación”, han sido los principios que ha exigido Beltrán para todo tipo de víctimas. La propuesta recoge reformas en determinadas leyes, ha explicado el delegado del organismo en España, como el régimen de incomunicación de los presos, un supuesto que puede “propiciar” las agresiones. “La tortura es un problema estructural del Estado. No hay torturas sistemáticas, pero hablamos de algo más que de casos aislados”, ha ahondado Beltrán.

Amnistía Internacional también defiende el cambio de algunos artículos de la ley de partidos y del Código Penal, porque algunos son “tan ambiguos que podrían aplicarse a personas que reclaman fines como la independencia sin haber cometido actos violentos”, algo que, según ha precisado, ya ha ocurrido.

Beltrán ha reivindicado el acercamiento de los presos de ETA a cárceles próximas a sus “lugares de arraigo”, aunque ha matizado que la medida se deberá llevar a cabo siempre que sea posible y a través de peticiones individuales.

Beltrán ha transmitido en la reunión que posteriormente ha mantenido con Urkullu algunos cambios en el proceder de la Ertzaintza. Entre ellos, en los protocolos de actuación de los antidisturbios para evitar “graves daños e incluso la muerte”, como sucedió, según ha recordado, en el caso de Iñigo Cabacas.