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EL PRIMER PRESUPUESTO DEL LEHENDAKARI IÑIGO URKULLU

El Gobierno vende un proyecto “sin recortes sociales” para lograr apoyos

Los partidos se decantan “a día de hoy” por enmendar las cuentas a la totalidad

Pedro Gorospe
El lehendakari Iñigo Urkullu con el rector de la UPV, Iñaki Goirizelaia, a su izquierda
El lehendakari Iñigo Urkullu con el rector de la UPV, Iñaki Goirizelaia, a su izquierdaAlfredo Aldai (EFE)

El Gobierno desvelará a medio día de hoy por donde va a meter la tijera. El Consejo dará luz verde a los presupuestos —para 2013— más vendidos como sociales de la historia, —mayor porcentaje pero misma cantidad—pero también los menos inversores de los últimos veinte años. El tremendo ajuste del gasto de las cuentas públicas desde 2008, sin que haya sido compensado por el lado del ingreso, llevará al consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria a presentar un proyecto tan controvertido como desconocido, que de momento no ha logrado concitar ningún apoyo, ni siquiera lejano de un grupo político de la oposición. Desde EH Bildu, hasta el PP pasando por el PSE y UPyD, han situado la enmienda a la totalidad en un horizonte más cercano que el apoyo, pese a que el contexto político está muy revuelto con numerosas alianzas puntuales entre todos los partidos. Socialistas y EH Bildu han pactado en Gipuzkoa, PP y PNV en Álava y Bizkaia.

El portavoz parlamentario del PNV, Joseba Egibar, aseguró ayer que su partido buscará el voto comprometido de los partidos más allá de abstención, y afirmó que no ve a las formaciones de la oposición “votando la devolución” de las cuentas. Pese a todo, para Egibar, el presupuesto de 2013 es un presupuesto de transición hacia el realmente importante, el de 2014, según sugirió, en el que fruto de la reforma tributaria que está en marcha habrá más recursos. “Las cuentas para 2013 se deben aprobar ahora para, a partir del mes de junio, sin descanso”, preparar las de 2014, aseguró el dirigente nacionalista. EH Bildu no lo tiene claro. La parlamentaria de la coalición, Marian Beitialarrangoitia, reconoció ayer que lo que han oído hasta ahora de los presupuestos les preocupa, pero no tomarán una decisión sobre si presentan o no una enmienda a la totalidad hasta que conozcan el proyecto en su integridad.

El portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor respondió que su partido está más lejos que cerca de aprobar las cuentas y destacó que el PNV “deberá esforzarse mucho” con el fin de lograr los apoyos necesarios para sacarlos adelante. “Por lo visto, el PNV ha conocido la palabra responsabilidad hace dos meses, hasta entonces, no había ninguna necesidad de ser responsable con el país, porque gobernaba el PSE”, señaló. Los socialistas vincularon la preocupación de los nacionalistas a la situación de minoría más que a una sensibilidad especial con los recortes que hay que aplicar. En su opinión el proyecto debe tener unos requisitos básicos, como el mantenimiento de los servicios públicos esenciales de sanidad, educación y políticas sociales, al menos en la misma cuantía presupuestaria que el año anterior.

El PNV “deberá

El proyecto contempla una disminución media de la disponibilidad de los departamentos cercana a 11,5% respecto de las cuentas del año pasado, 9.200 millones de euros de límite de gasto frente a los 10.450 millones de 2012 para el conjunto del Gobierno. El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, afirmó la semana pasada que el Gobierno se “ha ganado a pulso una enmienda a la totalidad”. Sin embargo, a pesar de estas manifestaciones públicas, hay gestos que parecen indicar que los populares podrían ser los menos reticentes a acabar facilitando el pase de las cuentas. El parlamentario y alcalde de Vitoria, Javier Maroto (PP), logró el compromiso del lehendakari de un canon para la ciudad de 5 millones de euros anuales durante toda la legislatura, pese a que, en un principio, el Ejecutivo no contemplaba esta cantidad.

Maroto, en lógica compensación dijo ayer que los partidos deben tratar de buscar acuerdos entre diferentes y añadió que “en la política vasca toca entenderse y pactar”. El secretario general del PSE-EE de Gipuzkoa, Iñaki Arriola, coincidió con la postura general de todos los partidos de estudiar las cuentas, pero desde la proximidad intelectual al rechazo. “Tenemos que analizarlo, pero es muy probable que los enmendemos a la totalidad”, dijo, después de comprobar como van a paralizarse los proyectos del metro de San Sebastián y puntos “sensibles” de Sanidad.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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