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INFRAESTRUCTURAS

Fomento admite que los recortes van a “ralentizar” varios tramos del AVE

El Gobierno vasco pregunta a Adif cómo va a afectar el retraso a la entrega de la obra

Pedro Gorospe
Las excavadoras atacan el arranque de los dos túéles de Albartia, en Leguitano, en las obras del AVE vasco.
Las excavadoras atacan el arranque de los dos túéles de Albartia, en Leguitano, en las obras del AVE vasco.

Los recortes presupuestarios en el Ministerio de Fomento van a tener serias consecuencias en la principal obra de infraestructuras que está acometiendo en Euskadi, el tren de alta velocidad, la denominada Y vasca ferroviaria. Fuentes oficiales del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, Adif, confirmaron ayer que hasta que no mejore la situación económica no habrá más fondos que los ya previstos para las obras de los tramos que están en ejecución en este momento y que, por lo tanto, “se va a ver ralentizado” el avance de los trabajos.

La escasez de recursos para estos tramos se debe a la decisión de Fomento de recortar en un 38,5% la inversión en el AVE vasco en 2013. Los Presupuestos Generales del Estado consignan 193 millones para el proyecto, frente a los 314 millones de 2012, pese a que Fomento insiste en la prioridad que da a la alta velocidad en Euskadi.

"Desmantelamos los

Estas fuentes de Adif no precisaron si puede haber inyecciones dinerarias adicionales a lo largo del año que permitan a las empresas adjudicatarias seguir a pie de obra. Según adelantó ayer EL PAÍS, la Unión Temporal de Empresas (UTE) que construye el tramo Lemoa-Galdakao (5,4 kilómetros) ha decidido parar las obras tras conocer que Adif, dependiente del ministerio de Ana Pastor, ha reducido a la mínima expresión la asignación económica que le corresponde para este año.

Las obras de Adif

Los 90,2 kilómetros del AVE vasco que gestiona Foemnto a través de Adif se han dividido en 22 tramos. Cuatro de ellos ya están acabados: Arrazua-Legutiano en sus fases uno (2,5 kilómetros) y dos (cinco kilómetros), Durango-Abadiño (3,5 km) y Mondragón-Elorrio (4,4 km).

Con plataforma finalizada ya suman 11,2 kilómetros, y 10 tramos en obras (45,6 km). Está pendiente de licitar el Atxondo-Abadiño (6,6 km).
Los cinco tramos del nudo de Bergara y los accesos a Bilbao (seis km) y a Vitoria (4,7 km) están en fase de redacción del proyecto.

Para acabar esa obra son necesarios casi 30 millones de euros y Adif solo ha dispuesto para este ejercicio de tres millones, el equivalente a un mes de trabajo, según un representante de la UTE, quien aseguró a este periódico que si esa es la realidad “desmantelamos los equipos y nos vamos”. La UTE que construye el tramo Durango-Amorebieta (para el que Adif ha consignado una anualidad de cinco millones) admitió que se encuentra en conversaciones con Adif para tratar este recorte, aunque no ha tomado ninguna decisión todavía. La construcción de la Y vasca está teniendo problemas prácticamente desde su arranque.

Si primero fue la oposición de ETA, con varios atentados contra las empresas que participan en su construcción, y de los grupos ecologistas, ahora son las estrecheces económicas las que frenan la ejecución. Ortiz Construcciones y Proyectos, Construcciones Murias y Enrique Otaduy, las tres adjudicatarias de la plataforma Lemoa-Galdakao, acordaron el martes “suspender temporalmente la obra” hasta que Adif “habilite más presupuesto” para la misma.

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, aseguró ayer a este periódico: “No tengo nada nuevo que aportar” a la situación de la citada obra. Quien sí se ha interesado por el estado de las mismas ha sido el Gobierno vasco.

El departamento de Política Territorial ha solicitado información puntual a Adif, en todos y cada uno de los tramos que está ejecutando la administración central, con el fin de prever el fin de obra, y conocer, sobre todo, la situación en la que quedan las empresas afectadas y la propia infraestructura. “Nuestras obras van bien, y vamos a ver cómo está el resto”, indicaron estas mismas fuentes oficiales.

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Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

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