Peritos ven arriesgado pero posible meter el ‘Prestige’ en Corcubión

Llevar al Prestige, al día siguiente de su accidente frente a la Costa da Morte, al abrigo de la ría más cercana, la de Corcubión, para intentar un trasvase de su fuel “era una maniobra perfectamente posible”. “Pero entrañaba un nivel de riesgo, la probabilidad de éxito era baja”, según un estudio teórico de la sociedad Siport XXI, encargado por el Estado español mucho después de la catástrofe. Ayer en el juicio que se desarrolla en A Coruña, los autores de este informe sobre escenarios alternativos en caso de accidentes marítimos en el noroeste peninsular ratificaron sus conclusiones sobre “la gran complejidad” de esa operación, contraria a la decisión del Gobierno de ordenar el alejamiento en alta mar del petrolero.

No obstante, el ingeniero naval José Ramón Iribarren tuvo dificultades para responder a las “contradicciones”, o incluso “sesgos” de ese análisis realizado con simulaciones. El estudio contratado por el Estado no tuvo en consideración los daños estructurales del barco, ni que estuviese roto, sino que sólo se basó “estrictamente en simulaciones de navegación y maniobras”, reconoció Iribarren. Y tampoco pudo explicar por qué partieron de la “teoría imposible”, en palabras del representante del capitán Apostolos Mangouras, de que se requerían como mínimo tres o cuatro remolcadores para llevar hasta Corcubión un petrolero que logró aguantar seis días recorriendo en medio de temporales y con cambios de rumbo 600 millas enganchado a un único buque.

“Maniobra precisa”

Pero, en opinión de este ingeniero, al margen de lo averiado que estaba el petrolero, su sobrecalado, tras llenarse de agua sus tanques para corregir su fuerte escora inicial, implicó “una pérdida de control del barco” que hubiera dificultado mucho “una maniobra de precisión” como supone meterlo en una ría tan cercana a la costa. “El riesgo es evidente, puede causar un problema muy serio”, afirmó Iribarren tras reconocer que, sin embargo, en “la mayoría” de las simulaciones realizadas para este estudio sí se logró con éxito meter al abrigo en un puerto un petrolero como el Prestige. Y además, en otro informe sobre puertos de refugios, la misma sociedad de ingeniería incluyó, en 2005 y por encargo de la Xunta, a la ría de Corcubión para la entrada de un buque “en condiciones medias o duras”, recordó el abogado de Nunca Máis.