Montoro contradice a la SEPI y dice que no descarta el dique de Ferrol

El Gobierno central sigue jugando al gato y al ratón con el dique flotante de Ferrol. El Ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, sorprendió hoy en el Congreso asegurando que el Ejecutivo todavía “no ha descartado nada”. El ministro contradice así a la SEPI, Sociedad Estatal de Participaciones Industriales que controla Navantia, que el pasado viernes fue tajante al afirmar que las dificultades económicas y jurídicas del proyecto eran “insuperables”.

El ministro, que en ningún momento mencionó el dique, hizo otros dos anuncios sorpresivos que no acabó de concretar. Primero, adelantó que “en marzo se van a empezar a cortar chapas” para un buque que no especificó, presumiblemente el flotel de Pemex, ligado a un polémico contrato que no se hizo público con la excusa de una estricta confidencialidad. Después, afirmó que la ocupación en el astillero ferrolano “es realmente alta” aunque el grupo naval firmó su último contrato para Galicia en 2007 y la cartera de pedidos está vacía.

Con calculada ambigüedad, Montoro respondió a las preguntas de la diputada Rosana Pérez sobre el futuro del naval gallego sin aclarar si construirán el dique, una plataforma flotante que permitiría a la ría ferrolana ser el gran taller del noroeste peninsular para reparar buques de gran porte que ahora no tienen espacio.

La nacionalista reprochó al PP que “engañasen” a los gallegos prometiendo en campaña un dique, “la promesa estrella de Feijóo”, remarcó, y que ahora no ejecutan pero que el ministro dice ahora que tampoco “descartan”.

Casi a la misma hora que Montoro se explicaba en la Cámara baja, más de 2.000 operarios de Navantia Fene y Ferrol y de su red de compañías auxiliares se concentraban ante el Parlamento gallego para exigir, entre cánticos y críticas a la corrupción política, carga de trabajo inmediata. La policía les mantuvo a 200 metros del cámara autonómica.

Los sindicatos aseguran que desde septiembre del 2011 se han perdido 1.815 empleos en subcontratas por la caída de la actividad y que la sangría laboral avanza imparable a razón de 100 puestos por cada semana que pasa sin iniciar la construcción del flotel de Pemex en una comarca asfixiada por el paro (28,3%) y con una dependencia enfermiza de Navantia.

Desde la presidencia del Comité, Ignacio Naveiras, de CCOO, asegura que Ferrol “no puede esperar” a que Barreras consiga los avales, y pidió a Feijóo que desligue ambos contratos para que al astillero público -Navantia- empiece el flotel sin aguardar por el privado de Vigo. Las factorías de Fene y Ferrol enfilan la recta final de la construcción del segundo megabuque para Australia, 'Adelaide', que entregan este verano, mientras la división de carenas (reparaciones) no da abasto y tiene que rechazar a importante clientes por falta de espacio físico.

Naveiras advirtió que los astilleros se quedan sin actividad en septiembre aunque el ministro no titubeó al decir que “afortunadamente”, hay carga de trabajo “garantizada para bastante tiempo”. Hasta tres veces, Montoro refirió a la ciudad naval como 'El Ferrol', un topónimo heredado del franquismo (El Ferrol del Caudillo) y desechado en 1982.