_
_
_
_
RUTA DEL VINO UTIEL-REQUENA

Entre copas a través de la historia

Lagares iberos, cuevas medievales, modernismo y arte en barrica conviven en el territorio bobal

Poblado ibero de Kelin.
Poblado ibero de Kelin.jesús císcar

"Aquí la muerte no sorprende a nadie", escribe en Aldea el poeta requenense Juan Vicente Piqueras, entre cuyos premios figura el Antonio Machado. Y sigue: “Todos saben que un día volverán a la tierra/ que son y que jamás, ni un solo día,/ han dejado de ser, de ver y de sentir". Los versos aluden a la aldea donde nació el autor, Los Duques, lugar de profundas raíces cerca del cual se encuentran Las Pilillas, unas almazaras y lagares de la época ibérica, probablemente del siglo VI a. C. donde podemos imaginar cómo sus antepasados ya pisaban la uva sobre la piedra. Ahora que la ruta del vino en la zona Requena-Utiel se consolida como oferta enoturística, a través de numerosas, variadas y cuidadas bodegas donde se trata de conjugar la tradición y el progreso, las excavaciones arqueológicas nos recuerdan que la ruta enológica empezó en Iberia.

Las Pilillas se encuentra actualmente en pleno trasiego arqueológico y recibe visitas muy contadas porque aún no está para recibir. Pero “es el plato fuerte” del territorio bobal que los bodegueros de la zona tratan de asentar como marca propia apoyándose en la variedad de uva más específica de esta tierra, que se llama así. Ese es el parecer de Jose Ángel Jesús-María, gestor cultural en el Ayuntamiento de Requena, aunque matiza que para formar parte del recorrido enofílico habrá de convertirse previamente en museo al aire libre.

Pistas

Para conocer. Ver Ruta del vino Utiel-Requena. http://www.rutavino.com. También en la Denominación de Origen Utiel-Requena. http://www.utielrequena.org. En la sede se puede visitar La Bodega Redonda, tlf. 962171062.

Para aprender. Museo del Vino en el Palacio del Cid. Somera, 13 (Requena). Tlf 96 230 32 81. Instalado en el Palacio del Cid (siglo XV), se dice que sobre el solar de la que fuera residencia de Rodrigo Díaz de Vivar.

Para evocar. Visitar el barrio de la Villa, en Requena, un conjunto histórico con trazado musulmán, en cuyo subsuelo hay cuevas que se utilizaban como graneros, almazara o bodega. Para información y visitas, telf. 96 230 38 51. cuenta con tres iglesias: la Iglesia de Santa María, la Iglesia de San Nicolás y la Iglesia del Salvador.

Para recorrer. Bodegas Torre Oria. Derramador, Requena. Crtra. Pontón-Utiel, km. 3. Tlf. 96232 02 89. www.torreoria.es. Bodega Hoya de Cadenas. Ctra. Utiel a Camporrobles km 8.5. Las Cuevas de Utiel. Tlfs. 96 218 25 07/ 647 745 7479. http://www.hoyadecadenas.es.

Para descansar. El Hotel Doña Anita es una casa señorial reformada, situada en el barrio medieval de Requena. Plaza del Albornoz, 15. 962 30 53 47.

Para visitar. Poblado de Kelin. Los Villares. Caudete de las Fuentes. Concertar visita en el Ayuntamiento. Teléfono 96 231 90 02.

A poco más de 20 kilómetros en dirección a Madrid, en la loma de los Villares de Caudete de las Fuentes, emerge otro poblado anterior a nuestra era de simpático nombre, donde se encontraron semillas de uva, además de lo que parece la casa de un comerciante de vinos y aceites que invitan a suponer una cultura del vino de arraigo antiguo. “Se cree que Las Pilillas es anterior”, puntualiza Jesús-María, aunque Kelin, un poblado donde se acuñaba moneda y desde el que se divisa a la perfección el paso del AVE en paralelo a la autopista, puede observarse de cerca concertando visita previa en el Ayuntamiento de Caudete, en cuyas dependencias hay una pequeña colección de objetos hallados en las excavaciones.

Y aunque no fuera entonces la principal fuente de riqueza de la comarca, ordenanzas del vino hay desde la misma Carta Puebla y bajo casas del casco histórico de Requena puede recorrerse un sugerente laberinto de cuevas que guardaban la uva y el vino. Puede verse también en su Museo del Vino una cueva con sus tinajas o un jaraiz, que era la primitiva y elemental bodega de una casa y trullos documentados desde el siglo XVI, porque ya pagaban impuestos.

Pero la tradición vitivinícola moderna tiene de partera a la filoxera, esa enfermedad que arrambló con los viñedos europeos pero fue leve en esta zona gracias a la resistencia de la uva autóctona, la bobal. El nuevo impulso de la producción fue animado aún más con el tren Utiel-Valencia, que generó bodegas en torno a las estaciones y alrededor del puerto de Valencia, donde actualmente sólo queda la de Valsangiacomo.

Ahora en Valencia sólo queda una gran bodega, mientras en el territorio bobal hay 36 embotelladoras y numerosas cooperativas que fabrican únicamente caldos. Tal vez la más llamativa en un entorno de creciente competencia sea la casa palacio modernista de Torre Oria, encargada al arquitecto José Donderis por la familia gallega Oria de Rueda, que llegó a finales del XIX a Requena atraida por la industria de la seda que allí floreció.

Bodega Hoya de Cadenas.
Bodega Hoya de Cadenas.JESÚS CISCAR

Un siglo después, y tras haber cambiado de manos y haber osado fabricar el primer cava valenciano, es un bien protegido que se puede visitar en su integridad junto a los árboles centenarios que le rodean. Son también de corte modernista los edificios de Más de Bazán o Emilio Clemente y no menos antiguo es el inmueble de Dominio de la Vega, mientras otros, como Hoya de Cadenas, venden numerosos servicios complementarios y también modernidad, en un museo de Arte en Barrica alimentado con obras de Mariscal, Miquel Navarro o Carmen Calvo, entre otros conocidos artistas, que los pobladores de Las Pilillas y Los Villares jamás hubiesen imaginado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_