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BBVA prevé que la economía catalana retroceda el 1,6% en 2012

El banco augura una "lenta recuperación", año en que viene sujeta a varias "incertidumbres" La deuda, de 42.000 millones de euros, sigue siendo el principal lastre a corto plazo

Lluís Pellicer

La crisis del euro de momento no ha agudizado la recesión en la que ha recaído la economía catalana, pero ese escenario no puede descartarse. BBVA prevé que este año el producto interior bruto (PIB) catalán se contraiga el 1,6% para empezar una "lenta recuperación" en 2013, eso sí, sujeta a muchas "incertidumbres". La mayoría de estas pasan por conocer la agenda de crecimiento que pueda marcar la Unión Europea, la consecución de los objetivos de consolidación fiscal para este año por parte de las comunidades y la capacidad política de los países de la zona euro para avanzar hacia una "mayor integración financiera y fiscal".

La mayoría de los interrogantes sobre la evolución de la economía catalana provienen ahora de lo que suceda en Bruselas y de lo que se decida en los despachos de Berlín, París y Madrid. Pero la economía catalana tiene también sus propios talones de Aquiles. A corto plazo, el principal es el endeudamiento, que alcanza ya los 42.000 millones de euros, lo cual supone el 21% del PIB catalán. "La deuda pública es soportable, pero exige hacer esfuerzos en en saldo presupuestario primario y en los ingresos y gastos", ha asegurado el responsable de Economías Desarrolladas de BBVA Research, Rafael Doménech.

Además de esa deuda, los "desequilibrios" que adolece la economía son el alto apalancamiento del sector privado, la tasa de paro, el ahorro familiar y el stock de viviendas de obra nueva que sigue sin salir al mercado. Doménech ha considerado que es "factible" la consecución del objetivo del 1,5% del PIB, puesto que en el último año -del segundo trimestre de 2011 al primero de 2012- este se ha situado algo por encima del 2,5%, justo en la media de las comunidades autónomas. Entre las fortalezas de la economía catalana a corto plazo, están el ajuste del precio de la vivienda, la apertura comercial y el PIB per cápita de la comunidad.

"Los indicadores a corto plazo indican más debilidad que a largo plazo", ha asegurado Doménech, que ha recordado que las perspectivas pasan por que los resultados sean algo peores que en el conjunto de España. En cambio, el servicio de estudios del banco prevé que la economía crezca luego con mayor rapidez. Acerca de cuándo se reabrirá el grifo del crédito, Doménech ha recordado que la comunidad está en proceso de "desapalancamiento".

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Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Nacional de EL PAÍS. Antes fue jefe de Economía, corresponsal en Bruselas y redactor en Barcelona. Ha cubierto la crisis inmobiliaria de 2008, las reuniones del BCE y las cumbres del FMI. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

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