Fernández sugiere un esfuerzo salarial a los trabajadores con el puesto asegurado

El presidente de Kutxabank, Mario Fernández, ha asegurado esta mañana que la entidad que preside está entre las más competitivas de España en todas las ratios salvo en costes salariales. En una jornada sobre financiación a pymes organizada por la patronal alavesa SEA y a la que acudió el consejero de Economía y hacienda del Gobierno vasco, Carlos Aguirre junto a los los directivos de la sociedad de garantía recíproca Elkargi, Fernández ha reivindicado el papel de la banca española y especialmente de la vasca frente a la del resto de Europa, pero ha hecho esa salvedad en materia salarial, aunque a renglón seguido ha porecisado que la competitividad y productividad de sus empleados es equiparable a quienes tienen salarios más bajos.

Fernández ha solicitado durante su discuros a las empresas que se fusionen y busquen alianzas para ser más competitivos en el exterior como una de las fórmulas para afrontar la crisis, ha vuelto a incidir en los elevados costes salariales pero referidos esta vez a los del País Vasco. En ese momento ha afirmado que "no es demasiado pedir, a los que tienen prácticamente garantizado su trabajo, un esfuerzo en términos de costes salariales".

Fernández además ha advertido de que medidas como las reformas del sistema financiero o la decisión de que auditores extranjeros analicen la solvencia de las entidades financieras españolas no va a conseguir que los mercados "se den por satisfechos" si no se "consensúan" con las autoridades de la Unión Europea y el Banco Central Euroepeo.

Aguirre, por su parte, ha afirmado que el incremento del déficit público registrado en España en 2011 hasta el 8,9% del Producto Interior Bruto (PIB) evidencia "las grandes dificultades" que existen para alcanzar el equilibrio presupuestario, tras lo que ha asegurado que "el problema del desajuste fiscal en España es de ingresos, no de gastos".

Aguirre ha lamentado que se esté "culpando" a las comunidades autónomas del excesivo déficit que presenta España, cuando, según ha indicado, estas son responsables de un desequilibrio situado en torno al 3,3 por ciento del PIB, cuando la Administración central llega al 5,2 por ciento.