Los Jaime I piden más obra civil

La comisión de economía del Alto Consejo Consultivo en I+D+i de la Presidencia de la Generalitat, nutrida por personas que han recibido el Premio Rey Jaime I, se reunió este lunes en Valencia para conocer la situación económica de la comunidad autónoma que expusieron miembros del Consell y para emitir unas conclusiones que serán remitidas al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra.

Al concluir su reunión, la entidad emitió un comunicado resumen que se parecía bastante a lo expuesto antes de comenzar a la prensa por el presidente de la comisión, el economista y exministro de UCD Jaime Lamo de Espinosa. Su primera conclusión fue que el presupuesto del Gobierno (no el de la Generalitat) debería aumentar fuertemente la inversión en obra civil para el año que viene. La segunda, que tras la intensidad con la que el Gobierno aplica los recortes este año, las autonomías deberán hacerlo el próximo.

Lamo de Espinosa recordó que entre los presupuestos de 2010 y los de 2012 la inversión en obra civil ha caído a casi la mitad: de 21.000 millones a 11.000. Y consideró que el año que viene debería remontar entre 7.000 y 10.000 millones para generar empleo, una vez que se ha demostrado que el sector privado no se encuentra en condiciones de hacerlo.

El economista explicó el efecto multiplicador de la inversión pública. Por cada millón de euros invertido, afirmó, se generan 18 o 20 trabajos fijos y se ingresan unos 570.000 euros de retorno fiscal. “Si eso se compara con el costo que esos trabajadores tendrían en subsidio por desempleo es evidente que es mejor pagar obra civil que subsidios”. Lamo de Espinosa mencionó como objetivo de inversión “las infraestructuras de transportes e hidráulicas”, aunque sin entrar en más detalle.

Lamo de Espinosa defendió, en cambio, los recortes aplicados en educación y en sanidad “porque se pueden producir muchos ahorros mejorando la eficiencia del trabajo”.

Aunque sus opiniones parecieron generar un amplio consenso en una reunión a la que también asistieron José Barea, Pedro Schwartz, José Terceiro, Rafael Repullo y Daniel Peña, este último, rector de la Universidad Carlos III, planteó antes del inicio de la sesión una visión diferente de las recetas a aplicar. Peña se mostró contrario a los recortes en educación, como los que han ampliado el número de alumnos por aula. El rector los consideró un “impedimento” con vistas al futuro del crecimiento español y subrayó que, cuando la crisis termine, será “importante cómo vamos a estar preparados para aprovechar las oportunidades”.

Peña achacó al Ejecutivo de Mariano Rajoy, en relación con los cambios anunciados para la Universidad, una de las críticas que más recibió su antecesor, José Luis Rodríguez Zapatero: “Hace falta un poco de tranquilidad, menos incertidumbre y un poco más de serenidad en las decisiones que se están tomando”, afirmó.

Peña también se refirió a la victoria del socialista François Hollande en Francia como una oportunidad para que la variable del crecimiento gane peso en Europa frente a las políticas de austeridad. En el resumen de los Jaime I, en cambio, no se citaba a Hollande, sino al vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rehn, abogando básicamente por lo mismo.