La polémica de los residuos adelanta la pelea Bildu-PNV en las autonómicas

La confrontación entre Bildu y PNV sobre cuál debe ser el sistema más idóneo en el tratamiento de las basuras de Gipuzkoa conlleva un innegable transfondo político, al que no es ajeno el resto de la oposición en las Juntas Generales de este territorio, y que pretende proyectar la imagen de “pésimos gestores” sobre la coalición abertzale,precisamente con la vista puesta en las próximas elecciones autonómicas. Desde la Diputación, Bildu admite este intento de “desgaste” porque, como admite uno de sus portavoces, “no deja ver el resto de la gestión que estamos haciendo, aunque sabemos que el viento sopla a nuestro favor”.

El tratamiento de las basuras refleja un pulso conceptual, acompañado de una manera de hacer política desde las instituciones. Así lo ven, por ejemplo, desde el PSE-EE. “Desde el momento en que la izquierda abertzale ha puesto a una persona de caza mayor como Juan Carlos Alduntzin al frente de este departamento [Medio Ambiente], todos sabemos que el tema lo consideran estratégico”, declara una juntera socialista.

“El Consorcio es quien decide sobre la incineradora, no las Juntas” (Bildu)

En el PNV no se salen de este carril porque así les permite ahondar en una intencionada interpretación política: “En este debate estamos viendo a la clásica izquierda abertzale, a la de las posiciones extremistas que nos tenía acostumbrados, que es la que quiere imponer su modelo, pero que choca con la realidad de lo que quiere de verdad la sociedad de Gipuzkoa”, añade un miembro del GBB que conoce bien los entresijos de la Diputación.

Desde el departamento foral de Medio Ambiente, muy conscientes del significado político y social de esta permanente pelea, están convencidos de que su apuesta “tiene el aval político de Europa, porque se trata de gestionar lo que generamos y lo que debemos hacer es prevenir, mentalizarse y reciclar y decir no a los tratamientos finalistas”, asegura un colaborador de Aldutzin, absuelto tras ser imputado en el caso Udalbiltza y que ha llegado a este departamento después de su paso por la alcaldía de Pasaia (1999-2003).

Bildu ha hecho de la alternativa a la incineradora una bandera ideológica. Se trata de una realidad admitida en las Juntas Generales de Gipuzkoa donde, paradójicamente, la mayoría rechaza esta propuesta de la coalición en el gobierno. Es aquí donde PSE-EE y PP imputan al PNV “toda la responsabilidad” de la actual situación. “El PNV no se atreve a romper con Bildu porque siguen acomplejados y creen que les iría peor y por eso buscan que los demás nos enfrentemos a ellos”, denuncia una juntera socialista.

En Bildu asumen la indisimulada intención del PNV de proyectar una imagen de “mala gestión” desde la Diputación de Gipuzkoa. Pero se sienten “blindados” por su “mayoría municipal” y, además, entienden que el sistema puerta a puerta “va a ser una realidad como está ocurriendo en ciudades europeas” por encima de los brotes críticos. Para el PNV, este sistema alternativo “no soluciona el problema, no tiene sentido, no sé si se va a implantar y lo que esperamos es que Bildu abra los ojos, de que sea consciente de que no está actuando correctamente”, apuntan desde el GBB.

“En el PNV no se atreven a romper con Bildu”, critican desde el PSE-EE

Así las cosas, en el seno de las Juntas Generales de Gipuzkoa, toda la expectación gira en torno a la evaluación que el PNV hará en junio sobre el grado de compromiso de Bildu a las condiciones recogidas en el acuerdo de Presupuestos y en las que se contempla el compromiso de Diputación para seguir adelante con la incineradora. “Nosotros les exigiremos que cumplan lo pactado”, afirman desde el PNV. “Ni las Juntas ni la Diputación firmaron el contrato de la incineradora. El contrato lo firmó el Consorcio de Residuos”, advierten desde Medio Ambiente. Y en este organismo, donde Bildu dispone de una holgada mayoría en base a la representación de los ayuntamientos, dirán que no quieren la incineradora.

¿Romperá entonces el PNV con Bildu? “Volverán a amagar como están haciendo desde el principio porque no se atreven a romper”, sostienen desde el PSE-EE. “Entonces les diremos que todo lo que está pasando es responsabilidad del PNV porque lo que iba a hacer Bildu ya lo sabíamos y no han cambiado. Están jugando a poli bueno, poli malo, echándonos a los demás encima cuando son ellos quienes se lo han jugado con el apoyo a los Presupuestos”, recuerda la portavoz socialista. En Bildu, en cambio, mucha tranquilidad ante el examen de junio. “El futuro sobre el contrato es una competencia que tiene el Consorcio, no las Juntas”. Órdago.