“Los recortes afectarán a la investigación contra el cáncer”

El oncólogo Javier Cortés participa en el Congreso Anual de la Sociedad Española de Salud Laboral en la Administración Pública, que arrancó ayer en la Alhóndiga de Bilbao y concluirá mañana. El Ayuntamiento bilbaíno ha participado en la organización de la cita.

Pregunta. En su ponencia relaciona cáncer, tratamiento y trabajo. ¿Cómo funciona ese trinomio?

Respuesta. ¿Cuál es la diferencia entre el cáncer y una cirugía o entre el cáncer y una diabetes? Pues hay dos. Los síntomas que puede dar y los efectos secundarios de los tratamientos. Cuando hablamos de cáncer y absentismo laboral… Mire, se puede trabajar o no igual que con cualquier otra enfermedad en función de los síntomas que produzca.

P. ¿En qué aspectos?

Mi reto es revertir los mecanismos por los que los tumores se hacen resistentes”

R. Primero, el estado psicológico del paciente. Éste es uno de los factores más importantes de absentismo. El segundo punto es vital. Cuando hablamos de cáncer hay dos grupos de pacientes: el paciente con cáncer metastásico, el que no se va a curar, y el que se cura. Cada vez más éste es el mayoritario y empezamos a ver supervivientes del cáncer. Es una de las pocas enfermedades que se pueden curar. En los supervivientes del cáncer sí influye la toxicidad residual de los efectos secundarios tardíos, lo que puede ser una causa de absentismo. No el hecho de haber tenido un cáncer. El cáncer no tiene por qué condicionar ningún aspecto laboral. Por último, hay que preguntarse quién debe llevar estos supervivientes. ¿El oncólogo, los médicos de atención primaria o los del trabajo?

P. ¿Cuál es la incidencia actual del cáncer de mama sobre la población femenina?

R. Están aumentando la incidencia y la prevalencia. Hablamos de entre 22.000 y 24.000 casos nuevos al año en España, teniendo en cuenta que por cada cien mujeres hay un varón.

P. ¿Cuánto pesa la genética y cuánto los hábitos?

R. Es un conjunto multifactorial. Alrededor de un 5% de los cánceres de mama son hereditarios. Los factores de riesgo son cada vez más habituales y los protectores, cada vez menos. Tener hijos, la lactancia y la edad temprana del primer embarazo, protege. Tabaco, alcohol y obesidad son factores de riesgo.

P. ¿Pasa mucho tiempo entre que el médico de cabecera detecta síntomas y el especialista lo diagnostica definitivamente?

R. Es bueno trabajar con celeridad, que no con prisa. No hay que precipitarse. Estoy cansado de ver pacientes que vienen operadas cuando lo mejor hubiera sido tratar antes de operar.

P. ¿Teme que los recortes por la crisis afecten a la investigación contra el cáncer?

R. No es que tema que los recortes puedan afectar a las investigaciones; es que lo harán. Es indiscutible. Hay muchos sitios que investigan, pero quizá haya que priorizar los excelentes. Investigar por investigar está bien, pero con una aplicabilidad.

P. ¿Cuál es en la actualidad el mayor reto al que se enfrenta la oncología?

R. No puede morirse un solo paciente con cáncer. El mío personal es ver los mecanismos por los cuales los tumores se hacen resistentes a los tratamientos y revertir ese proceso.

P. ¿Qué proporción de la población terminará padeciendo algún tipo de cáncer?

R. Un 40% de los hombres y un 33-35% de las mujeres en el año 2020.