Ugarte resta importancia a que Bizkaia deje de recibir sus basuras
El Gobierno de Garitano no ha solicitado aún renovar el convenio que expira el 12 de junio
El pulso entre las Diputaciones de Gipuzkoa y Bizkaia por las basuras sigue aún vivo, a falta de solo tres meses para que expire el convenio que ambas instituciones tienen firmado, en virtud del cual el vertedero vizcaíno de Igorre recibe 25.000 toneladas anuales de residuos guipuzcoanos. El desencuentro institucional no tiene visos de resolverse por la vía del acuerdo, pues ambos Gobiernos forales defienden planteamientos de partida que resultan inasumibles para la otra parte.
El portavoz de la Diputación vizcaína, José María Aburto, aseguró ayer que exigirá a Gipuzkoa “causas justificadas” para prorrogar el convenio que finaliza el próximo 12 de junio, y aseguró que el Gobierno presidido por Martín Garitano, ni el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa, se han puesto han solicitado renovar el permiso.
Larraitz Ugarte, en nombre de la Diputación guipuzcoana, quiso restar importancia a la posibilidad de que el contrato con Bizkaia no se repita. “No será un problema serio porque hay otras alternativas” para la gestión de los residuos de la provincia (350.593 toneladas el año pasado). Entre esas alternativas, Ugarte citó la opción de enviar basura a otros territorios, “seguir adelante” con los tres vertederos abiertos en Gipuzkoa y la construcción de plantas de compostaje.
Ugarte: “Cabe la opción de enviar residuos a otros territorios”
La portavoz foral de Gipuzkoa afirmó que “generar miedo \[con los residuos\] no tiene razón de ser”, algo de lo que culpó al PNV y al diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao. Le acusó de ser “el emisario del PNV” y moverse por “un fin político evidente” cuando advierte de forma “repetitiva” que la renovación del convenio está ligada a la construcción de la incineradora de Zubieta.
Ugarte también despreció la campaña que ha iniciado el PSE en 26 municipios en contra el sistema de recogida puerta a puerta. Dijo que este modelo no es “insalubre y retrasado”, como han criticado los socialistas, sino “futurista, progresista y medioambientalmente respetuoso y solidario”.
Por otro lado, representantes de Bildu de Gipuzkoa aseguraron que cabe alcanzar el entendimiento con el PNV y los socialistas en materia de residuos si estos dos partidos “dejan a un lado sus intereses partidistas” y “se centran en resolver el problema”.
La presidenta de la Mancomunidad de San Markos, Ainhoa Intzaurrandieta, y la alcaldesa de Lezo, Ainhoa Zabalo, ambas de Bildu, lamentaron el “rifirrafe mediático” que se ha originado tras anunciarse que 34 municipios de Gipuzkoa en que gobierna la coalición van a adoptar el puerta a puerta para recoger sus basuras a partir de 2013.
En una rueda de prensa, afirmaron que “cuando es el sentido común se impone a los intereses partidistas y el objetivo no es criminalizar a toda costa al adversario político, los responsables institucionales no dudan en elegir el puerta a puerta como el mejor sistema de recogida selectiva”.
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