Mas carga contra las comunidades "más subsidiadas" que suben los presupuestos

El presidente catalán, Artur Mas, volvió ayer a incidir en el debate territorial al deplorar que las comunidades “más subsidiadas” estén aumentando sus presupuestos, en contraposición con los severos ajustes que se están aplicando en Cataluña. Mas fue con pies de plomo y no citó a Andalucía, pero en noviembre ya subrayó el agravio comparativo que, a su juicio, suponía que esa comunidad proyectara aumentar sus cuentas. La semana pasada planteó la misma queja tras reunirse en La Moncloa con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Ante un auditorio de 150 empresarios, en Sant Cugat (Barcelona), Mas pidió una “reflexión profunda” al conjunto del Estado ante el hecho de algunas comunidades —“y no precisamente las más productivas, sino las más subsidiadas”— revisen al alza sus cuentas. “Con la que está cayendo y con las políticas de austeridad impuestas desde fuera, ¿cómo se atreven a subir sus presupuestos?”, se preguntó tras defender el pacto fiscal. Andalucía ha aprobado unas cuentas de 32.020 millones de euros (un 1,1% más que en 2011). El 83% de esa partida está destinada a gasto social, un 1,4% más que el ejercicio anterior.

La reflexión de Mas se inscribe en la asfixia económica que sufre la Generalitat, que en 2011 redujo por primera vez en su historia su Presupuesto. El único capítulo que creció fue el destinado a pagar intereses. Mas aplicó unos recortes draconianos en sanidad y educación, que ni siquiera le han servido para cuadrar los números: calculó un déficit del 2,66% y se ha disparado al 3,29%. Los de 2012 no van a correr mejor suerte: CiU quería recaudar ingresos con una tasa turística y otra sanitaria, pero el Partido Popular, el aliado de su Gobierno en minoría, le ha obligado a reducirlas a la mínima expresión.

Mas no  ha citado esta vez a Andalucía pero en otras ocasiones si que se había quejado por la política económica de esa comunidad

Las críticas a los políticos andaluces las expuso de forma explícita el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran, quien en otoño acusó a los jornaleros de cobrar el PER cuando “se pasan el día en el bar”. Mas siempre ha sido más prudente, pero comparte su rechazo a los subsidios. El presidente catalán ya desató una ola de críticas en Andalucía cuando en el Parlamento catalán defendió la política de inmersión lingüística asegurando que los alumnos catalanes sacaban las mismas notas que los de otras zonas de España, por no hablar, dijo, de los gallegos o andaluces, que “a veces no se les entiende”. El coordinador general de IULV-CA, Diego Valderas, acusó anoche a Mas de querer con sus críticas a Andalucía “tapar” sus recortes en Cataluña y de hacerle “la pelota al PP”. “La derecha catalana y española unen sus fuerzas y coinciden en sus posiciones contra Andalucía”, dijo.