Un año clave para la mariposa monarca: Estados Unidos decidirá en 2025 si la incluye en su lista de especies amenazadas

EL PAÍS ofrece en abierto la sección América Futura por su aporte informativo diario y global sobre desarrollo sostenible. Si quieres apoyar nuestro periodismo, suscríbete aquí.

Estados Unidos ha dado un paso hacia adelante para conservar a la reina de las mariposas. El Servicio de Pesca y Vida Silvestres (USFWS, por sus siglas en inglés), la agencia federal del Gobierno encargada de la protección de especies, propone que la mariposa monarca entre en la lista de especies amenazadas del país, bajo la Ley de Especies en Peligro de Extinción. Esto acortará el camino hacia la recuperación de esta especie y podría salvar la migración multigeneracional que la caracteriza mediante el acceso a mayores recursos, coordinación, e investigación. Se aceptarán comentarios públicos sobre la propuesta hasta el 12 de marzo de 2025 y, tras ser evaluados, se dará a conocer el veredicto. De incluirse, podrían añadirse en la normativa acciones de protección específicas para este animal.

Si bien la mariposa monarca ya formaba parte de la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) desde 2022, esta clasificación no es vinculante ni tiene jurisdicción en Estados Unidos. Esta categoría únicamente señala las especies amenazadas desde un punto de vista de conservación, mas no de recursos de fondos económicos. La petición de USFWS, sí los tendría. “2025 es un año muy importante para esta especie. Se van a decidir muchas cosas sobre ella”, dice Rebeca Quiñonez-Piñón, estratega de recuperación de mariposas monarca de National Wildlife Federation. El 90% de las especies que entran en esta categoría federal han logrado recuperarse.

Quiñonez-Piñón celebra una decisión que tardó mucho en llegar. Se produce después de años de estudio y una demanda que exigía una mayor implicación en la conservación de este insecto de menos de medio gramo que pasa su vida viajando entre Estados Unidos, Canadá y México. “Servirá para protegerla. De ser finalmente incluida es una muy buena noticia, porque las cifras son alarmantes”, cuenta por teléfono la experta mexicana. Aunque se desconoce el presupuesto con el que contaría, sería un apoyo generoso a nivel federal.

Con sus llamativas manchas anaranjadas y negras, la mariposa monarca es uno de los insectos más reconocidos del mundo. En América del Norte, las monarcas se agrupan en dos poblaciones migratorias de larga distancia. La población oriental, que es la más grande y pasa el invierno en las montañas del centro de México, y la occidental, que pasa el invierno principalmente en la costa de California.

En la actualidad, se estima que la población migratoria oriental ha disminuido aproximadamente un 80%. La población migratoria occidental ha disminuido más de un 95% desde la década de 1980, lo que coloca a las poblaciones occidentales en una probabilidad de extinción de más del 99% para 2080. Durante este mismo período, la probabilidad de extinción de las monarcas orientales varía entre el 56% y el 74%, según la evaluación más reciente del estado de las especies de USFWS.

Aunque en 2023 la monarca aumentó su número levemente hasta los 335.479 ejemplares, los expertos se reconocen preocupados ante las amenazas que acechan los hábitats que transitan. El cambio climático, la destrucción de ecosistemas por la deforestación o la sequía y la exposición a insecticidas están poniendo en jaque a un polinizador clave. “No debemos minimizar el hecho de que la migración, un fenómeno único, también está en peligro”, narra.

Es por ello que el USFWS también propone la creación de un hábitat para la especie en sus hábitats propios de hibernación en la costa de California. Este proporcionaría un lugar de descanso esencial para las mariposas monarcas durante los meses fríos de invierno y las ayudaría a prepararse para la reproducción a principios de la primavera. La mariposa monarca es una especie icónica que requiere un enfoque colaborativo y multisectorial para asegurar su supervivencia. Así lo anunció en un comunicado Matt Mulica, director de proyectos senior del Centro de Políticas Keystone y facilitador principal de Farmers for Monarchs. “La agricultura productiva y la conservación de la mariposa monarca pueden prosperar juntas a medida que la especie migra a través de millones de acres que sustentan nuestro alimento, combustible y fibra”.

Según Collin O’Mara, presidente y director ejecutivo de la Federación Nacional de Vida Silvestre, este es un llamado a la acción “para que todos los estadounidenses salven a esta majestuosa especie”. “Hay que unir fuerzas para plantar algodoncillo y plantas nectaríferas nativas en todo el país: nuestros jardines, escuelas, parques, empresas, lugares de culto, tierras de cultivo y mucho más. Al trabajar en colaboración, recuperaremos y salvaguardaremos a esta especie icónica para las generaciones futuras”, dijo en un comunicado.

Para la académica mexicana, el mundo está viendo extinguirse a una especie fundamental en dos ámbitos: el ecológico y el cultural. Desde la primera perspectiva, las monarcas son un gran indicador de que el ecosistema cuenta con una gran biodiversidad ya que, por su capacidad migrante, interactúa con decenas de especies en la vida silvestre. “Estas mariposas regulan la salud de los hábitats. Que decline su número implica que otros polinizadores están sufriendo lo mismo que ellas”, lamenta.

En el último año, la presencia de mariposas monarca en sus áreas de hibernación en México disminuyó de 2,2 hectáreas a 0,9 hectáreas. Este es el segundo año con el peor registro y muy por debajo de los indicadores de recuperación que los científicos han determinado.

Por otro lado, explica, la migración de estos insectos tiene un significado cultural muy fuerte en México y forma parte de la cosmovisión y tradiciones indígenas. Hoy, sigue siendo un símbolo del día de muertos en su país. “Representa a los seres queridos que partieron. Su llegada tras el periplo a Estados Unidos coincide con estas fechas y es algo que está muy arraigado a la cultura mexicana”. La desaparición de estas mariposas también sacude las tradiciones de todo un país.