Llegan los Emmy 2023 en un Hollywood en huelga: de las 27 nominaciones de ‘Succession’ al triplete de Pedro Pascal

Arranca la temporada de premios en el cine y la televisión. Y lo hace con las nominaciones de los Emmy, anunciadas a las 8.30 de la mañana en Los Ángeles (17.30 en la España peninsular) con pocas sorpresas para los nominados, pero con muchas incógnitas en cuanto a la entrega de premios. El panorama está agitado en Hollywood este año. Los guionistas están en huelga desde hace más de 70 días, con la esperanza de mejorar su convenio colectivo. Y los actores pueden seguir el mismo camino: a medianoche de este miércoles (9 de la mañana del jueves en España) se cumple el plazo que se han dado para negociar con los sindicatos. De no alcanzar sus objetivos, sobre todo económicos, podría producirse, efectivamente, una doble huelga que paralizaría la industria audiovisual en todo el país.

El productor y presidente de la Academia, Frank Scherma (que nada más empezar su breve presentación, se ha referido a la huelga, esperando “que las negociaciones lleguen a buen puerto”), y la actriz de Community y guionista Yvette Nicole Brown han dado a conocer en directo las nominaciones a las 11 categorías principales del total de 124: mejor reality show y talk show y también mejor serie en tres categorías, limitadas, dramática y de comedia, así como los actores y actrices principales de esas tres. Además, hay otro centenar de premios más técnicos que premian desde la producción, el guion, el casting, la fotografía o la coordinación de dobles.

En los Emmy de 2023 destaca Succession, que acaba de poner punto y final a su cuarta y última temporada. Se lleva un total de 27 nominaciones; la siguen The Last of Us, con 24; The White Lotus, con 23 (el año pasado competía en miniserie) y Ted Lasso, con 21. De los seis nominados a mejor actor en la categoría de serie dramática, tres son de la serie de HBO: el patriarca y dos de sus hijos, es decir, Brian Cox, Jeremy Strong y Kieran Culkin. La tercera de los hijos protagonistas, Sarah Snook, está nominada a mejor actriz. También otros cinco intérpretes se llevan nominaciones como secundarios: Nicholas Braun, Matthew Macfadyen, Alan Ruck y Alexander Skarsgård, así como, entre las actrices, J. Smith-Cameron.

The Crown está nominada a mejor serie dramática, pero esta vez no lo están ninguno de sus actores principales, aunque sí Elizabeth Debicki como secundaria por interpretar a Lady Di. Es la única con candidatura. Algo que ocurre con The White Lotus, la sensación de la pasada temporada, que también está nominada a mejor comedia y a la que no le cae nada en las categorías principales de interpretación, pero en este caso porque se trata de una serie muy coral. En las categorías de mejor reparto logra 11 nominaciones: entre los actores lo consiguen F. Murray Abraham, Michael Imperioli, Theo James y Will Sharpe; y entre las actrices Meghann Fahy, Aubrey Plaza, las italianas Sabrina Impacciatore y Simona Tabasco y, de nuevo, Jennifer Coolidge; de las ocho candidatas a mejor actriz de reparto en drama, cinco son de la serie. Jason Sudeikis logra la nominación como Ted Lasso en la serie homónima, así como Phil Dunster y Brett Goldstein como secundarios, y también las actrices Juno Temple y Hannah Waddingham; como invitados lo logran Sam Richardson, Becky Ann Baker, Sarah Niles y Harriet Walter; ellas tres copan la mitad de las nominadas en esa categoría de mejor actriz invitada en una comedia.

En otra de las sensaciones de la temporada, The Last Of Us, también sus dos protagonistas están nominados, tanto Pedro Pascal (fenómeno del año, que se lleva otras dos nominaciones, como secundario de comedia por presentar un programa de Saturday Night Live y como narrador por un documental sobre la Patagonia) como Bella Ramsey. De Solo asesinatos en el edificio, el único actor nominado es Martin Short; si el año pasado de los tres protagonistas solo Selena Gomez se quedó fuera, este año también lo hace Steve Martin. La maravillosa señora Maisel celebra su despedida con opciones para su actriz principal, Rachel Brosnahan, y la propia serie.

Entre otros nombres nominados aparecen los de Jessica Chastain, Riley Keough, Daniel Radcliffe, Taron Egerton, Keri Russell, Juliette Lewis, Jenna Ortega, Ray Liotta, Taraji P. Henson, Elisabeth Moss o Julie Andrews, aunque en este caso por su voz, como narradora de Los Bridgerton. En esa categoría, la de narradores, están también nominados Morgan Freeman, Angela Bassett... y Barack Obama, como la voz de la serie documental de Netflix What We Do All Day.

Un calendario complicado

Quién gane se sabrá próximamente... pero no se sabe cuándo. La huelga ha hecho que también la ceremonia de entrega penda de un hilo. Si se quiere celebrar dentro del año en el que los premios cumplen su 75ª edición, podría ser en noviembre. Eso es lo que pretende la Academia de Televisión de EE UU, que es quien reparte las nominaciones y que quiere que sigan la tradición y sean los primeros premios, sin que se adelanten los Globos de Oro (el 7 de enero) o los de la Crítica (el 14, si es que se celebran). Pero puede que se muevan a enero, como busca la cadena Fox, quien los emite, para asegurarse una fecha con menos eventos deportivos y familiares (noviembre es el mes de Acción de Gracias y también hay fútbol).

Quien haya seguido en directo las nominaciones habrá podido ver la fecha del 18 de septiembre en sus pantallas, que es la que han anunciado sus presentadores. Desde 1977, los premios siempre tienen lugar en septiembre (a excepción de 2001, tras los atentados del 11-S), pero fuentes de la industria ya descartan casi por completo esa fecha, demasiado cercana, dadas las circunstancias. Porque, para empezar, ¿quién iba a hacer el guion? Si ni los programas diarios, como El show de Jimmy Kimmel, cuentan con quienes les escriban los chistes, a ver qué guionista iba a atreverse a firmar el libreto de una gala de tal calibre. Porque tendría que ponerse a escribirlo a finales de este mes, principios de agosto, a más tardar. Y la huelga de guionistas no tiene visos de resolverse tan rápido.

La fecha, por tanto, para ver quién levanta las estatuillas se resolverá cuando también se sepa el destino y la decisión del sindicato de actores, en pocas horas, si las negociaciones no se alargan. No parece que vayan a hacerlo, según las pocas noticias —las dos partes han decidido mantener el silencio ante los medios hasta que acaben las conversaciones, pero siempre nos quedarán las filtraciones— que se conocieron ayer: pretenden que este miércoles definitivamente todo se resuelva, y que para ello cuentan con un mediador federal, es decir, con una tercera persona ajena al proceso que les intentará ayudar. El destino de los actores, de Hollywood y de los Emmy, y probablemente de toda la temporada de producciones y también de premios, está a pocas horas de resolverle.