‘Intimidad’, protagonizada por Santi Millán

Intimidad, qué bonito nombre tienes. La de verdad y la que da título a la serie de Netflix, creada por Verónica Fernández y Laura Sarmiento, ocho capítulos sobre las consecuencias de la violación de la intimidad de dos mujeres muy diferentes, una política de Bilbao y una operaria de una fábrica. Dos casos que recuerdan a Olvido Hormigos y a la trabajadora de Iveco que se suicidó en 2019 después de que se filtrara entre sus compañeros un vídeo sexual protagonizado únicamente por ella.

Los avatares de Olvido Hormigos pudieron ser hace unos años los protagonistas de una serie de los Javis, de los pocos creadores de ficción nacional que entienden la crónica rosa como lo que es: un espejo del mundo en el que vivimos. Al final nos tuvimos que conformar con la trama protagonizada por Belinda Washington en la tercera temporada de Paquita Salas (Netflix).

Tráiler Intimidad

Intimidad ha llegado tan puntual a la cita con los temas que importan, que, diez días después de su estreno, Santi Millán ha sido víctima de la filtración y difusión de un vídeo en el que aparece manteniendo relaciones sexuales con una mujer. Una mujer que, no olvidemos, también es víctima de ese delito. Intimidad tiene un pertinente sesgo de género, como lo han tenido y tienen muchas otras series, solo que cuando es masculino a menudo se viste de universal. Bien nos contó hace unos meses Pam & Tommy que no es igual que te exhiban en esas lides si eres hombre que si eres mujer, pero, por suerte, el delito es el mismo y se persigue de la misma manera. Una amiga ha recibido el vídeo del actor en el grupo de WhatsApp de madres del colegio de su hijo. Hombres filtrados y mujeres filtradoras. Qué empeño en igualarnos a la baja.

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