Zuckerberg compra Storylane

Nacieron hace seis meses con solo cinco trabajadores. Storylane, tras obtener 2,8 millones de dólares de los inversores para su lanzamiento, pasa a formar parte de Facebook, la mayor red social, por una cantidad que no se ha revelado. Más que una compra de contenido, se trata de la adquisición de una compra de tecnología y talento.

En este tiempo apenas han ganado popularidad, pero sí cuentan con prestigio por su forma de presentar el contenido. Su dinámica es muy similar a Medium, la última creación de Evan Williams, uno de los fundadores de Twitter. A partir de imágenes, textos, fotos y vídeos la aplicación crea una línea temporal, intercalando el contenido audiovisual. Una forma de reforzar, justo cuando acaban de renovar la presentación multimedia.

Storylane se centra en nuevas narrativas. Convierte el contenido en algo más cercano y emotivo. Su lema es: "Los soñadores, los creadores, los viajeros y los obstinados. Explora y contribuye a la biblioteca de todo lo importante en nuestras vidas".

La primera consecuencia de la venta es la imposibilidad de darse de alta. No aceptan nuevos miembros. Jonathan Gheller, creador del servicio, explica los motivos de la venta en el mensaje de despedida: "Tenemos una oportunidad excitante. La misión de Facebook es conectar el mundo como nunca antes se hizo potenciando las relaciones humanas y profesionales de manera especial".

Gheller aclara que Facebook no se ha hecho con los datos ni el contenido de la plataforma. "Estamos construyendo la plataforma para poder migrar los contenidos y exportarlos a otros servicios si así lo deseais".

Hace solo una semana que Mark Zuckerberg salió de compras. Se hicieron con Atlas, dedicada a la medición y análisis de audiencias, hasta entonces de Microsoft, por una cantidad estimada en unos 60 millones de euros. En abril de 2012 emplearon 765 millones en Instagram, entonces la aplicación de moda.

Sin embargo, pasar a formar parte del gigante de Menlo Park no es garantía de éxito. Friendfeed lo sabe bien. Este agregador pasó a manos de Facebook en agosto de 2009 por 15 millones de dólares en efectivo y 32 más en acciones. Aunque sigue en funcionamiento, no se nota desarrollo o avance alguno. Forma parte de la arqueología 2.0.