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Apple y Microsoft, una rivalidad sólo en aparencia

Steve Jobs y Bill Gates charlan sobre el futuro de la informática, plagado de nuevos dispositivos móviles e interfaces en tres dimensiones

Después de ver la entrevista de Bill Gates y Steve Jobs, fundadores de Microsoft y Apple, durante la conferencia tecnológica All things Digital, uno concluye que estos dos personajes no son esos enemigos acérrimos que todos imaginamos. Más bien parecen viejos colegas, que han compartido un largo camino, que en unos momentos han estado muy distanciados, pero que en otros han sido socios íntimos.

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Ellos mismos lo reconocen. "Hemos mantenido un matrimonio secreto estos últimos diez años", bromea Jobs. "Los dos hemos asumido importantes riesgos. Hemos trabajado juntos y ha sido divertido", añade Bill Gates. Los dos reconocen que tienen más cosas en común de las que sus respectivos usuarios pueden pensar. A lo largo de los años, las dos compañías han colaborado desde sus inicios, y en algunos casos el apoyo de Microsoft fue fundamental para que Apple saliese adelante.

Por ejemplo en 1997, cuando Jobs regresa a Apple porque la empresa se encontraba al borde la quiebra, el apoyo de Microsoft fue fundamental. La compañía de Gates invirtió 150 millones de dólares en Apple y mostró su compromiso para seguir desarrollando aplicaciones como Office y Explorer para Macintosh.

Jobs recuerda esos momentos. "Quisimos romper con el paradigma que hacia pensar a la gente que para que Apple fuese bien, Microsoft tenía que perder, y viceversa. Pero no tenía por qué ser así. Para mi Microsoft es el mayor desarrollador de software para Mac. Tenemos una gran relación", asegura Jobs.

Al descubrir esta relación tan amistosa, los entrevistadores no pueden evitar sacar a la luz los agresivos anuncios de Apple en los que contraponen un Mac con un PC para hacer unas críticas muy negativas de Windows. "Nosotros no somos quienes hacemos esos anuncios", dice Jobs bromeando, al que Gates sigue la broma, sin ninguna acritud.

Los dos ejecutivos parecen realmente tener más puntos en común que enfrentamientos: los dos recuerdan los tiempos en colaboraron en construir el primer sistema Macintosh, y se echan flores. Jobs admira que la visión de Gates para vislumbrar la importancia del software, y crear la primera compañía centrada exclusivamente en los programas. Gates achaca a Jobs el mérito de haber conseguido hacer que el ordenador personal llegase a las masas. "Ambos hemos construido los productos que nos gustaría utilizar a nosotros. Además, Steve le ha aportado su gusto y estilo, que ha tenido un impacto enorme", reconoce el hombre más rico del mundo.

Entre tantas flores, ambos ejecutivos adelantaron y reflexionaron sobre el futuro de la industria. Estas son algunas de las comentarios acerca de distintos temas.

Dinosaurios en al era de la web 2.0

Tanto Jobs como Gates creen que la industria tecnológica está viviendo un momento "muy saludable" con muchas iniciativas nuevas. La cuestión es que frente a estas empresas montadas alrededor de Internet, donde el poder está en la red, y cuyos servicios sólo necesitan de un simple navegador para funcionar, los que se centran en los ordenadores, en los terminales, parecen los dinosaurios de la industria.

Pero Gates y Jobs tienen otra visión. Al contrario, creen que se está viviendo una explosión de nuevos dispositivos para acceder a estos servicios, y que van mucho más allá del puro navegador.

"Cuanto más rico sea tu teléfono, tu terminal, podrá tener una experiencia mejor", opina Jobs, quien distingue entre aparatos de propósitos generales como los ordenadores o los teléfonos y los dispositivos específicos, como los navegadores, los cámaras de fotos o los reproductores de MP3 que a su modo de ver son los que van a centrar la mayoría de las innovaciones.

Gates coincide en señalar que no se va a imponer un único dispositivo, y cree que el área donde se está dando más experimentación es en el cruce entre el ordenador portátil y la telefonía móvil, incluso habla de unas pantallas desplegables para poder ver con más detenimiento ciertos contenidos a los que accedes desde dispositivos móviles, pero que no quieres ver en una pantalla pequeña. Permaneceremos atentos a los laboratorios de Redmond.

Industria de la música

"La gente quiere ver lo que le gusta en cualquier momento y en el dispositivo que desee. Es un momento de transición, y como todas las transiciones son difíciles. Hay un montón de experimentos, pero va a ser muy bueno, y los propietarios de contenidos deberían estar contentos porque se van a ver más contenidos que nunca", asiente Jobs, cuando se le pregunta por el impacto de Internet en las industria del cine y la música.

"El iPod lo hicimos nosotros porque nuestro negocio es el software. Fue una empresa japonesa quien hizo la música saliese a las calles, pero no tenía software. Sin software, no hay iPod, ni hay iTunes. Sin software sólo te queda una caja bonita", reflexiona Jobs.

Las tres dimensiones

Uno de los próximos saltos de la informática para Bill Gates es la introducción de las tres dimensiones, y los interfaces que se puedan tocar. Una de las muestras de esta idea ya la hemos visto en el recién presentado "Surface", en los que los usuarios manejan las aplicaciones desde una pantalla, que más bien parece una mesa, y de manera totalmente táctil. "El software va a poder ver, escuchar, y tener tres dimensiones. Todo esto va a pasar", concluye Gates, que a lo largo de su conversación también menciona la "Round Table", un producto que aún es sólo un prototipo, pero que seguirá este camino.

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