_
_
_
_

La Fiscalía pide la pena máxima para Dominique Pelicot: “El objetivo del juicio es cambiar las relaciones fundamentales entre hombres y mujeres”

El ministerio público reclama 20 años de cárcel para el acusado “por sus conductas abyectas”

Gisèle Pelicot se retira de la corte penal de Aviñón este lunes
Gisèle Pelicot se retira de la corte penal de Aviñón este lunesYOAN VALAT (EFE)
Daniel Verdú

La petición de la pena máxima no era una sorpresa. Veinte años era lo que podía esperarse para el acusado de violar durante 10 años a su mujer, a la que drogaba sistemáticamente para que otros hombres, más de 50, también abusaran de ella en su propio domicilio. Lo interesante, justo cuando el proceso por las violaciones cometidas y orquestadas por Dominique Pelicot llega a su parte final, era leer la argumentación de la Fiscalía. “El objetivo del juicio es cambiar las relaciones fundamentales entre hombres y mujeres”, señaló el ministerio público en su escrito. El proceso deberá ahora continuar y la defensa deberá pronunciar también su alegato. La sentencia se espera para el próximo 20 de diciembre.

El juicio por las violaciones de Mazan entra en su recta final tras 11 semanas de audiencias en el tribunal de Aviñón. Este lunes comenzaban los alegatos finales de la Fiscalía, iniciando con Dominique Pelicot, el septuagenario que durante esos 10 años drogó, violó y permitió que otros violaran a su esposa. En la jornada que se celebra en el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, la Fiscalía se refirió así al proceso: “Este juicio sacude nuestra sociedad en su relación con el otro, en los vínculos más íntimos entre seres humanos. Nos obliga a comprender nuestras necesidades, nuestras emociones, nuestros deseos y, sobre todo, a tener en cuenta los del otro”, declaró Jean-François Mayet, el primero de los dos representantes de la acusación en tomar la palabra, subrayando una de las claves de un juicio cuyas conclusiones penales están tan claras. Es decir, que el objetivo “no es solo una condena o una absolución”.

La Fiscalía también detalló que se han tenido en cuenta tres circunstancias agravantes para solicitar la pena: que estas violaciones se cometieron en grupo, por parte del cónyuge y, finalmente, bajo sumisión química. La acusación pública también mencionó delitos vinculados a estas violaciones, como la difusión de imágenes sexuales de su hija Caroline y de sus dos nueras. “Cuando Dominique Pelicot escribe [a los internautas a quienes envía las fotos de sus nueras y su hija] ‘estoy rodeado de buenas putas’, no actúa por un impulso. Ha tenido tiempo de reflexionar sobre lo que hacía”, subrayó la abogada general. Y continuó: “Esta observación demuestra que la desviación de Dominique Pelicot no se limita únicamente a su esposa”.

Las fotos de la hija

Pelicot volvió a negar la semana pasada que tomara esas fotos de su hija Caroline o que abusara de ella, algo que provocó un violento enfrentamiento entre ambos en la sala. Ante la ausencia de elementos objetivos y materiales, no se presentaron cargos de violación ni de sumisión química contra Dominique Pelicot en relación con su hija. “No se minimiza su sufrimiento, por muy legítimo que sea, pero no todo sufrimiento puede traducirse en términos jurídicos”, declaró la Fiscalía sobre esta parte del caso.

“No hay sorpresas. Quizá sí sobre las motivaciones. Creo que la Fiscalía no tiene en cuenta la personalidad de Dominique Pelicot”, señaló su abogada, Beatrice Zavarro, resignada con la pena solicitada. “Está abatido, claro. Pero el caso de los demás habrá que verlo también”, insistió en referencia a una de las claves de la defensa, basada en que Pelicot no manipuló al resto de violadores. La cuestión ahora, quizá más interesante penalmente, es qué grado de responsabilidad y qué pena se solicitará para los otros 50 acusados de violar a Gisèle Pelicot.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Daniel Verdú
Nació en Barcelona pero aprendió el oficio en la sección de Madrid de EL PAÍS. Pasó por Cultura y Reportajes, cubrió atentados islamistas en Francia y la catástrofe de Fukushima. Fue corresponsal siete años en Italia y el Vaticano, donde vio caer cinco gobiernos y convivir a dos papas. Corresponsal en París. Los martes firma una columna en Deportes
Rellena tu nombre y apellido para comentarcompletar datos

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_