Cambio de hora octubre 2022: España pasa al horario de invierno

La noche de este sábado 29 al domingo 30 se moverán nuestros relojes una hora. Se produce el cambio al horario de invierno en España, y a las 3.00 de la madrugada serán las 2.00, con excepción de las Islas Canarias, que lo hace con su respectiva hora de diferencia. Además de ganar una hora de sueño, a partir del domingo amanecerá y anochecerá más temprano. El cambio es el segundo del año, el primero se realiza en marzo, y el objetivo es adaptar la jornada laboral para aprovechar mejor las horas de luz y ahorrar energía.

Cambio de hora

En la madrugada del domingo

se retrasa la hora.

2

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A las 3.00 serán las 2.00

Cambio de hora

En la madrugada del domingo

se retrasa la hora.

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A las 3.00 serán las 2.00

Cambio de hora

En la madrugada del domingo se retrasa la hora

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A las 3.00

serán las 2.00

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La medida, concebida en el siglo XVIII con una motivación meramente económica para ahorrar combustible, llega esta vez en un momento de gran preocupación por el aumento de los precios de la energía derivado de la guerra en Ucrania. El argumento habitual a favor de los cambios estacionales sigue siendo el aprovechamiento de la luz natural y la reducción del gasto energético. Pero cada vez son más quienes piensan que el ahorro que se obtiene es mínimo.

“Realmente hay pocos estudios que demuestren cuál es la cantidad de energía que se ahorra con el cambio”, explica el fisiólogo Emilio J. Sánchez Barceló, autor del libro Hicimos la luz... y perdimos la noche sobre los efectos biológicos de la luz. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE) cifra en 300 millones de euros ese ahorro, de los que 90 millones corresponderían a los hogares españoles. Eso supone unos 6 euros de ahorro por familia. “Son cantidades modestas. Tenemos que plantearnos el problema con otros enfoques. Hay que ahorrar energía, no cambiando la hora, sino tomando una serie de medidas mucho más efectivas, como reducir la iluminación de los escaparates”, opina. Los cálculos del instituto son además aproximados y no están actualizados, ya que son de hace 10 años y no contemplan los cambios en las tarifas de luz.

“Los estudios más recientes al respecto coinciden en que el cambio de hora no genera ahorro energético o que no es significativo”, coincide César Martín Izquierdo, Presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (ARHOE). “Ahora existen factores que antes no se daban y no se tenían en cuenta, como las nuevas exigencias de eficiencia energética en iluminación y climatización o el auge del teletrabajo, que ha cambiado la rutina espacio-tiempo de muchos ciudadanos”, explica.

Debate en la Unión Europea

Bruselas recoge estos saltos estacionales en la directiva europea 2000/84/CE, con la que cumplimos desde 2001 y que marca el último fin de semana del otoño como momento clave. Sin embargo, la misma Comisión Europea aprobó en 2018 un proyecto de directiva para poner fin a los cambios durante el año siguiente. Realizaron una encuesta a 4,6 millones de ciudadanos, en la que el 84% de los participantes se mostraron a favor de dejar de cambiar la hora en Europa. Se recomendó a los gobiernos de los estados miembro mantener su propio horario de preferencia, y la decisión se pospuso a 2021, pero a día de hoy todavía no se ha tomado una decisión y no hay fecha concreta para hacerlo.

El cambio se realiza en la mayoría de los países occidentales y en todos los países de la Unión Europea, pero hay algunos en los que no ocurre, como en Islandia, Rusia, Turquía o Japón. Este mismo fin de semana es el último en el que los mexicanos tendrán que ajustar el reloj, algo que llevaban haciendo desde 1996, ya que la Cámara de Senadores mexicanos ha puesto fin permanentemente al horario de verano. Estados Unidos aprobó también este año una ley en el Senado para abandonar el cambio horario, aunque estos pretenden quedarse con la jornada estival. “La propia Unión Europea reconoció que no hay datos que confirmen el ahorro, por lo que entendemos que este es un debate ya superado”, explica el presidente de ARHOE.

En España, sin embargo, los españoles tendremos que seguir pendientes hasta por lo menos 2026. El BOE recoge las fechas de inicio y final de los horarios de invierno y verano hasta ese año, y la comisión de expertos puesta en marcha por el Ejecutivo decidió en 2019 mantener los cambios estacionales y el huso horario actual. Según los datos del barómetro de septiembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), un 64% de los españoles son partidarios de acabar con el cambio de hora entre el invierno y verano, y de ellos un 92,9% preferiría que se acabara con la práctica este mismo año.