Aumenta la emisión de lava del volcán de La Palma cuando se cumplen 50 días de erupción

El mirador del Time ofrece una de las mejores perspectivas del volcán de La Palma. Allí, a 700 metros de altura, dos turistas procedentes de Barcelona estaban impresionados este sábado por la noche ante la cantidad de lava que expulsaba la montaña. “Habéis tenido suerte, hoy está furioso”, les dijo Jorge Pérez, un palmero de 34 años que también se encontraba en el mirador. 50 días después de que el volcán de La Palma entrase en erupción, los expertos que monitorizan la evolución de la crisis han advertido de un aumento en la emisión de lava, tras varias jornadas en las que se había registrado menor expulsión de magma.

Este episodio está en la línea de la tesis que los portavoces del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) vienen manteniendo en las últimas jornadas: es pronto para pensar que nos acercamos al final de la erupción. “Este fenómeno, ya desde su inicio, va acompañado de muchos cambios de intensidad. Puede haber episodios de una aparente falta de intensidad durante un periodo, que se refleja en el tremor (vibraciones volcánicas prolongadas) y en coladas menos voluminosas, y luego haber una intensificación sin que ello represente más que el comportamiento natural de estas erupciones”, ha explicado en rueda de prensa este domingo la responsable de vulcanología del Instituto Geográfico Nacional (IGN), Carmen López.

Este aumento de la emisión de lava no significa que crezca la superficie arrasada: las lenguas de lava están paradas. Como en los últimos días, el magma es asimilado en la colada existente, ya sea haciendo que crezca en altura o rellenando huecos entre los materiales depositados. Hasta ahora el magma ha alcanzado 983,44 hectáreas y el perímetro de esta superficie es de 56,2 kilómetros.

El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha asegurado que la colada puede volver a moverse, pero no lo hará sustancialmente si se mantiene el escenario eruptivo actual: “Dependemos fundamentalmente de la apertura del cono, hacia donde expulse la lava y por dónde se mueve. Mientras se mantenga la situación actual, tenemos que entender que es favorable para nuestro objetivo de que no haya más superficie arrasada ni más daños”.

También ha aumentado en las últimas horas la emisión de ceniza. La calidad del aire es buena en casi toda la isla, pero es “extremadamente desfavorable” por las partículas en suspensión menores de 10 micras en Los Llanos de Aridane, a pie de volcán. Los expertos han recordado a la población de esta zona que es obligatorio llevar mascarillas FFP2 y han pedido que limiten sus desplazamientos lo máximo posible, especialmente en coche, ya que la circulación de vehículos levanta las cenizas. Además, han recordado que se desaconseja la práctica deportiva y salir de casa a las personas con afecciones respiratorias. Por otro lado, sigue cayendo la emisión de dióxido de azufre y crece la de dióxido de carbono. Y, al menos en las próximas 48 horas, no se esperan problemas para el tráfico aéreo.

La sismicidad ha decrecido respecto a días anteriores: el terremoto más relevante se produjo en Fuencaliente este sábado a las 20.40, de magnitud 4,5. “El nivel de sismicidad actual sigue indicando que es posible que se produzcan más sismos sentidos”, indica el informe del Pevolca.