Argentina legaliza el autocultivo de marihuana para uso medicinal
El decreto presidencial reglamenta también la venta de aceite de cannabis en farmacias
Argentina ha legalizado el autocultivo de marihuana para uso medicinal y permitirá la venta de aceites, cremas y otros derivados de la planta en farmacias autorizadas, según la nueva reglamentación publicada este jueves en el Boletín Oficial. La regulación, firmada por el presidente, Alberto Fernández, pone fin a la criminalización de quienes cultivaban con fines terapéuticos.
“Resulta impostergable crear un marco reglamentario que permita un acceso oportuno, seguro e inclusivo y protector de quienes requieren utilizar el cannabis como herramienta terapéutica”, dice la reglamentación de la ley de cannabis medicinal que reemplaza a la que estaba vigente desde 2017. El principal cambio es que a partir de este jueves todas las personas que necesiten cultivar cannabis para tratar enfermedades o que otras personas lo hagan por ellas —de forma individual o en asociaciones— van a poder hacerlo legalmente.
Hasta ahora, la tenencia de semillas y plantas de marihuana estaba penada sin excepciones por la ley de drogas (23.737) con hasta 15 años de prisión. Además, la reglamentación anterior limitaba el uso del cannabis medicinal a una única patología: la epilepsia refractaria. “En 2017 no reglamentaron el autocultivo y otra vez quedamos a la deriva, como delincuentes a las que nos podían imponer una pena de entre cuatro a quince años. Cualquiera podía ser allanada o si me entraban a robar en casa no podía llamar a la policía porque tenía plantas”, cuenta Valeria Salech, presidenta de la organización Mamá Cultiva, que nació en 2016 para promover la legalización del cannabis con fines terapéuticos. “Siento que me saqué una mochila de cien kilos de encima como presidenta de una organización que incentiva el autocultivo”, agrega Salech.
Quienes cultiven deberán anotarse en el Registro del programa de cannabis (Reprocann), que emitirá las autorizaciones correspondientes. “Los y las pacientes podrán inscribirse para obtener la autorización de cultivo para sí, a través de un o una familiar, una tercera persona o una organización civil autorizada por la Autoridad de Aplicación”, señala el texto. Para obtener la autorización será necesario contar con una prescripción médica y haber suscripto el consentimiento correspondiente. La reglamentación no establece por ahora un número máximo de plantas por domicilio y lo deja pendiente para futuras resoluciones.
Otros de los puntos destacados es el impulso a la producción pública y el acceso para aquellos pacientes sin seguro médico. Se impulsa la producción pública mediante los laboratorios nucleados en la Agencia nacional de laboratorios públicos y se distribuirá a través del Banco nacional de drogas oncológicas y farmacias. Argentina podrá importar y comprar especialidades medicinales fabricadas en el país. Las personas que no cuenten con obra social o seguro privado podrán acceder también a preparados.
La legalización del autocultivo de cannabis para fines medicinales supone una victoria y un reconocimiento para quienes se movilizan desde hace años con este objetivo en Argentina. “Se fueron organizando redes y crearon organizaciones civiles que actualmente gozan no solo de reconocimiento jurídico, sino también de legitimación social”, añade el decreto.
Las organizaciones canábicas celebraron la decisión del Gobierno, que consideran un gran paso hacia una ley integral que regule todos los usos de la planta. La diputada oficialista “¡AL FIN! La nueva reglamentación es un avance que nos compromete a seguir trabajando por ampliar derechos”, tuiteó desde su cuenta Mamá Cultiva.
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