Illa descarta un confinamiento general y perimetrar Madrid por la covid

El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ve en estos momentos innecesario un confinamiento generalizado de la población, como se produjo en marzo por la pandemia, y tampoco ve viable un “confinamiento perimetral” de Madrid por el aumento de los contagios, según ha dicho este jueves en una entrevista en SER Catalunya. Illa responde así al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien dijo el día antes que un 80% de los casos de contagios de la comunidad les llegan “de la bomba radioactiva vírica que se plantó en Madrid”. El consejero de Sanidad castellanomanchego, Jesús Fernández Sanz, ha insistido este jueves en la necesidad de que se limiten las reuniones sociales en Madrid y que se tomen restricciones similares a las que ya se aplican en su región.

“Ahora el confinamiento perimetral de Madrid no procede”, ha dicho el ministro, un día después de mantener una reunión telemática con los consejeros de la Comunidad de Madrid, Castilla-La Mancha y Castilla y León para tratar de reducir los contagios entre estas regiones limítrofes. Durante el encuentro, se analizó la situación epidemiológica de las tres autonomías, y se acordó mantener reuniones periódicas, según fuentes del departamento de Illa, con el objetivo de “prevenir futuros escenarios y coordinar acciones si fuera necesario”.

El consejero de Sanidad madrileño, Enrique Escudero, ha criticado este jueves las declaraciones de García-Page. Para Escudero, “tratar de buscar culpables” en la pandemia es “un argumento de una pobreza absoluta”. Ha incidido en que “el virus se comporta como se comporta” y que es este “el gran culpable de lo que está pasando”. “Es como si nosotros en esta segunda ola culpabilizamos a los temporeros que fueron a Lérida y que, luego, a partir de ahí fueron aumentando los contagios en el resto de comunidades autónomas... Me parece que son argumentos que casi rozarían el ridículo”, ha remachado, en una entrevista en Telecinco.

Escudero ha explicado que, en la reunión con Illa y sus homólogos ―con los que asegura que mantiene una “excelente relación”―, dijo que “la Comunidad de Madrid irá tomando medidas conforme vaya valorando cuál es la situación epidemiológica, principalmente en el sentido de contener”. Principalmente, vigilarán los rebrotes en el entorno familiar, en las terrazas, en velatorios o en actos multitudinarios.

Su homólogo castellanomanchego ha justificado las palabras de García-Page, que fueron “una manera de expresar” que en la primera oleada de marzo, la región fue de “las más castigadas” por la movilidad y la cercanía con la capital. La situación “fue una bomba”, según ha afirmado Fernández en la Cadena SER, pero ha pedido “quitarle emoción y hablar de datos objetivos y de incidencia por número de habitantes”.

El consejero ha pedido que Madrid tome medidas “comunes o similares” a las ya tomadas en Castilla-La Mancha, sobre todo en el ámbito social, porque son la única “salvación a la transmisión”. “Tiene que haber medidas similares en territorios similares”. Fernández ha puesto como ejemplo limitar el número de personas en reuniones o controlar más estrictamente que se respeta la distancia de seguridad en terrazas.

“Escenario de control”

Illa ha explicado que las conurbaciones importantes, como Barcelona o Madrid, son espacios donde las medidas para contener el virus “tienen que estar muy bien pensadas”, pero ha subrayado que, en general, “se está haciendo un buen trabajo en todos lados”.

Así, aunque se está produciendo un incremento sostenido de casos de coronavirus en todas las comunidades, excepto en Aragón, que está en descenso, y Cataluña y el País Vasco, que avanzan hacia la estabilización, esta situación no se está traduciendo en una presión hospitalaria como la que había en marzo y abril, en pleno estado de alarma.

“Estamos en un escenario de control. Hay que detectar los casos y actuar con velocidad y contundencia para romper las cadenas de transmisión”, ha señalado Illa, que cree que ahora no conviene aplicar medidas generalizadas y que nadie debería tomarse la implementación de medidas regionalizadas o locales como un “señalamiento”.

“Estamos viendo un incremento de casos, pero no tiene punto de comparación con lo que vivimos en marzo, no hay una saturación del sistema. Hay que hacer actuaciones concretas, como estamos haciendo”, ha incidido el titular de Sanidad, que ha remarcado que “no hay contradicción entre economía y salud pública”.

En cuanto al inicio del curso escolar, Salvador Illa ha reafirmado que las clases van a poder empezar con normalidad en septiembre y que si se produce algún caso de contagio ya está previsto cómo reaccionar.

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