“Quiero que mis hijos puedan pasear por las playas de Cádiz en el futuro”
España se quedará sin osos pardos en 2070 por los efectos del cambio climático
El deshielo del Ártico nos afectará más de lo que creemos. Con esta premisa, Greenpeace ha retomado una campaña para conseguir que la Asamblea General de las Naciones Unidas declare las aguas internacionales del Ártico espacio protegido y se prohíba la explotación petrolífera y la pesca mundial. La división española de esta ONG cuenta con la colaboración de rostros conocidos, como el cantante Alejandro Sanz, que trasmiten sus temores sobre el cambio climático y acercan a los ciudadanos a sus efectos en España. Sanz, por ejemplo, asegura que quiere que sus hijos conozcan las playas de Cádiz.
Un estudio del Ministerio de Medio Ambiente advierte de que el cambio climático acabará con la población de oso pardo entre 2040 y 2070 y otro de Greenpeace de que sólo se podrá esquiar en algunas pistas de Pirineos entre 2020 y 2050, porque no quedarán estaciones de esquí por debajo de los 2.000 metros de altitud.
“Los ministros de Exteriores de la Unión Europea deben elaborar una política de protección para el Ártico”, reclama la organización. Greenpeace ha diseñado la campaña Salvar el ártico es salvar mucho más para recaudar fondos que les permitan continuar plantando cara a empresas petrolíferas, como la anglo-holandesa Shell, a la que consideran principal responsable de abrir la región y provocar una fiebre por el petróleo del Ártico. Hasta el momento han recogido más de tres millones de firmas para reivindicar ese acuerdo mundial.
En 2011 ya se había perdido el 75% del hielo marino del ártico en temporada estival, en comparación con los niveles máximos existentes desde 1979, fecha desde la que se tienen datos por satélite. Aunque la recomentación global es de mantener el calentamiento global por debajo de un aumento de los 2ºC, o incluso por debajo de 1,5ºC, el aumento de la temperatura media global es de 0,7ºC. En Europa esa cifra subre a los 0,9ºC y en España a 1,5ºC, según datos de la organización.
"Salvar el Ártico es la batalla medioambiental más importante del momento, porque está en juevo uno de los pocos lugares del planeta donde aún existe un equilibrio medioambiental y porque lo que suceda en el Ártico nos afecta a todos", asegura Pilar Marcos, responsable de la campaña de Greenpeace.
El deshielo del Ártico, provocado por el cambio climático, contribuye a la subida del nivel del mar, produce alteraciones en los patrones climáticos o libera gases de efecto invernadero como el metano, entre otros efectos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.