Rusia aprueba la ley antitabaco

Rusia se suma a la lista de países que prohíben fumar en lugares públicos. La Duma, el Parlamento ruso, ha aprobado la medida por 441 votos a favor y solo uno en contra, según informa una agencia rusa de noticias. La medida se irá implantando progresivamente en un Estado en el que fuman casi un 33% de sus habitantes, siendo el mayor mercado mundial, solo superado por China.

La norma debe ser ahora ratificada por el Senado y promulgada por el presidente, Vladimir Putin. Si se cumplen los plazos, desde el próximo 1 de junio estará prohibido fumar en establecimientos estatales, centros educativos, hospitales, estadios, restaurantes, trenes, estaciones de ferrocarril y metro. Tampoco se podrá fumar a 15 metros de la entrada en estaciones de trenes, aeropuertos y  metro.

En 2014, también entrará en vigor la restricción del consumo del tabaco en establecimientos hoteleros, de restauración y andenes de trenes de cercanías. En virtud de la nueva ley, las empresas tabaqueras no podrán celebrar loterías o patrocinar eventos que puedan suscitar el interés hacia el tabaco. También se prohíbe mostrar productos de tabaco en tiendas.

El Gobierno ruso firmó la Convención Marco sobre Control de Tabaco con la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2008, lo que ha obligado a adoptar medidas más duras contra el tabaco antes de 2015. Son medidas urgentes, teniendo en cuenta que alrededor de 400.000 ciudadanos rusos mueren anualmente por causas relacionadas con el tabaquismo. Más del 60% de los hombres y el 20% de las mujeres rusas fuman.

400.000 rusos mueren anualmente por causas relacionadas con el tabaquismo

La Convención Marco sobre el Control del Tabaco de la OMS entró en vigor en 2005, con 40 Estados firmantes, entre ellos todos los de la Unión Europea. En Rusia ha sido el primer ministro, Dmitri Medvédev, quien impulsó la medida, contando con el apoyo de Guennadi Oníschenko, jefe sanitario ruso, quien se ha mostrado muy satisfecho con la votación: “Este día pasará a la historia del Estado ruso como el día en que se dio un enorme paso para la protección de la salud de la población", ha dicho. Según el Ministerio de Sanidad ruso, la ley permitirá reducir al 25% el número de fumadores.

El jefe sanitario criticó a la "mafia del tabaco" por intentar manipular a la opinión pública contra la nueva ley, cuyos efectos, según los expertos, solo se harán notar dentro de cinco o siete años. La producción de 400.000 millones de cigarrillos al año en Rusia le parece a Oníschenko desorbitada. Además, se producen de una materia prima desconocida, porque Rusia no produce ni una planta de tabaco en su territorio".

Mientras, los críticos con la nueva ley llamaron a respetar también los derechos de los fumadores y no convertirlos en chivo expiatorio de los problemas sanitarios nacionales. En concreto, llamaron a tener en cuenta las condiciones meteorológicas  de Rusia, ya que obligar a salir a fumar al aire libre a un trabajador puede disparar las enfermedades respiratorias durante el crudo invierno.