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Condenados dos adolescentes por planear el ‘crimen de Facebook’

Los jóvenes holandeses pagaron a un chico de 14 años para que apuñalara a una amiga

Isabel Ferrer

Una pareja de novios adolescentes holandeses que incitaron a un tercero a matar a una amiga, por haberles criticado en las redes sociales, han sido condenados a dos años de reformatorio y tres de tratamiento psiquiátrico. Conocido como el 'Crimen de Facebook', ocurrió el pasado enero y ha conmocionado al país ante la juventud de los protagonistas. La víctima, Joyce Winsei Hau, tenía 15 años cuando fue apuñalada en el umbral de su casa en Arnhem, al este del país. Polly W., la amiga que se enfadó con ella, había cumplido 16, uno menos que su novio y cómplice, Wesley C. El autor del crimen, Jinhua K., de apenas 14, cumple ya un año de detención en un centro de menores y tres de internamiento psiquiátrico.

Los fiscales habían pedido que los novios fueran tratados como adultos dada la gravedad del crimen. Los jueces, sin embargo, han preferido mandarles a una institución especializada para que sean atendidos por psiquiatras de menores. “Es inimaginable que una amistad pueda acabar de manera tan atroz. Que el cariño se convierta en odio”, reza la sentencia. También recuerda el abuso que supuso buscar a un chico como Jinhua K. para perpetrar el delito. “Tiene un desorden del comportamiento con trazos psicóticos, y resultó fácil convencerle de que lo hiciera. Admiraba a Wesley C.”, señala el informe de los expertos.

Según la reconstrucción de los hechos, las dos chicas se pelearon. La víctima escribió un comentario en su página de Facebook insinuando que Polly salía con otros chicos, a pesar de tener novio. Furiosa, Polly preparó minuciosamente el asalto y presionó para que sucediera lo antes posible. El momento ideal para ella hubiera sido antes de Navidad. De este modo, a la vuelta de las vacaciones se habría librado ya de su examiga. Durante un mes y medio, los tres cómplices ensayaron el crimen: Polly se encargó de recoger los movimientos de Joyce; Wesley buscó el cuchillo y la forma de llegar a su casa. Una vez convencidos de que saldría bien, Jinhua K., llamó a la puerta de Joyce y le asestó varias puñaladas sin mediar palabra. A cambio pudo recibir unos 100 euros. La chica murió cinco días después en el hospital. Su padre resultó herido de gravedad intentado protegerla. Su hermano pequeño, que lo vio todo, sigue traumatizado.

Su muerte, y el reciente suicidio de Tim Ribberink, un joven de 20 del que se burlaban también en Internet, han reavivado el debate sobre el uso de Facebook, y otras redes sociales, para evitar dramas similares.

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