Castilla-La Mancha debe 26,5 millones a sus ambulancias
Los trabajadores no han cobrado tres nóminas pero no pueden hacer huelga
"No tenemos dinero". Es la única explicación del impago a los conductores de ambulancias de urgencia de Castilla-La Mancha que arguye Ángel Gastón, gerente de Transaltozano, concesionaria del servicio. Los más de 1.000 trabajadores no han cobrado las nóminas de diciembre, la paga extra de ese mes y febrero. La Comunidad reconoce una deuda de 26,5 millones de euros con la compañía, pero Luis Carretero, director del Servicio de Salud castellanomanchego (SESCAM), argumenta que este problema "lo tiene que solucionar la empresa".
Los conductores han organizado varias protestas y están convocados a ocho jornadas de huelga en marzo (todos los martes y jueves). "Pero si no vamos a trabajar se nos puede caer el pelo si ocurre cualquier urgencia", se lamenta Mariano Cuartero, conductor en Toledo. Los servicios mínimos que ha establecido la Comunidad son del 100%, limitando la capacidad de protesta de los trabajadores bajo el argumento de que su labor es "esencial". Los trabajadores —los que no tienen guardias— se concentran esos días a las puertas de los hospitales de las principales ciudades manchegas. "Pero la Administración hace oídos sordos", se queja Cuartero.
"La Comunidad nos debe facturas desde junio de 2011, no tenemos liquidez y los bancos no nos dan más dinero", explica Gastón. El director del SESCAM afirma que Transaltozano no es la única empresa con la que la Comunidad tiene deudas, "pero otras no han dejado de pagar las nóminas". En medio, los trabajadores. Sin sus sueldos de entre 1.500 y 1.700 euros al mes empiezan a no poder hacer frente a algunos de sus pagos. "La semana que viene el banco me va a reclamar judicialmente la letra del coche", dice Antonio Rozas, conductor en Talavera de la Reina (Toledo). Su vehículo no es lo único que ha dejado de pagar, tampoco ha podido pasar la pensión de 200 euros a su exmujer. "Afortunadamente ella entiende mi situación y no me va a demandar, pero otros compañeros tienen problemas con esto".
La Comunidad ha establecido servicios mínimos del 100%, limitando la capacidad de protesta de los trabajadores
En el PSOE regional creen que este es un problema de "prioridades". Aunque la Comunidad garantice el servicio, no lo hace con los pagos. Un portavoz socialista asegura que el equipo de María Dolores de Cospedal "está utilizando la crisis como coartada para hacer un cambio de modelo sanitario". Señala que la Administración se retrasa, precisamente, en las facturas de las farmacias, los dependientes, las viudas y ahora las ambulancias. En este sentido, el director del SESCAM afirma que se pondrá en marcha un plan de pago a proveedores "pronto", sin poder precisar más una fecha.
Los trabajadores se muestran escépticos: no creen que cobren aunque la Comunidad pague la deuda pendiente. Desde 2009 Transaltozano ya se retrasaba en el pago de las nóminas. El pasado diciembre mandó un mensaje de móvil a sus empleados en el que decía que no se trataba de una demora, sino que no cobrarían. "Pensamos que era una broma, pero no", dice Cuartero, uno de los 300 trabajadores, según UGT, que ha denunciado a la empresa. "Tengo dos hijas, de ocho y 14 años, las criaturas no hacen más que pedir y antes que nadie está mi familia", defiende. Los sindicatos, los afectados y la Comunidad coinciden en culpar a la empresa. "Han hecho una mala gestión", reiteran los trabajadores y representantes sindicales. Piden, por ello, que se le retire a Transaltozano la concesión que vence el próximo junio. El director del SESCAM confirma que no ha tomado ninguna decisión al respecto, pero promete que los trabajadores acabarán cobrando sus sueldos. Mientras se resuelve el conflicto, como dice un empleado, "la hucha se va agotando".
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