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La Fiscalía anuncia que luchará contra las ratas de El Gallinero

El fiscal jefe de la Audiencia Provincial se ha comprometido a estudiar las condiciones de insalubridad del poblado chabolista

La Fiscalía de Madrid abrirá una investigación sobre las condiciones de insalubridad que han generado, entre otras cosas, una plaga de ratas en el poblado chabolista de El Gallinero. A raíz de las denuncias del sacerdote Javier Baeza, de San Carlos Borromeo de Entrevías y coordinador de la Coordinadora de Barrios, y Jorge Rodríguez, que coordina las actividades de intervención social de esta Parroquia, el fiscal jefe de la Audiencia Provincial se ha comprometido a abrir una investigación. Eduardo Esteban trasladará la denuncia a la Fiscalía de Medio Ambiente para esclarecer posibles responsabilidades penales por las toneladas de basura que se acumulan desde hace años en torno al kilómetro 11 de la carretera de Valencia.

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La denuncia de Baeza y Rodríguez se sustenta en el deterioro ambiental del poblado y el riesgo para la la salud de las 500 personas, aproximadamente, que viven allí, como consecuencia de la degradación socio-sanitaria.

La denuncia, a la que ha accedido Europa Press, está precedida por una serie de movilizaciones que se están realizando en la Plaza de la Cibeles contra el Ayuntamiento de Madrid por las ratas que invaden este poblado chabolista en el que viven más de 320 niños. El Consistorio se comprometió en el Pleno de enero de 2010 a limpiar las "toneladas de desperdicios de El Gallinero". Baeza ha insistido en que las protestas se dirigen contra el Consistorio porque no cumple con su palabra. "Queremos que se limpie de ratas el Gallinero. Todo el mundo se horroriza con la situación de este poblado, pero nadie hace nada para evitarlo", ha recalcado.

Lucía, rumana de 44 años, tiene cinco hijos y 24 nietos. La mitad viven en el poblado chabolista de El Gallinero. La mujer comparte su chabola de dos camas con su marido y cuatro nietos. Su casa es de las pocas con paredes de ladrillo. Lucía no quería madera para evitar incendios como los de otras casas. "Tengo miedo del fuego", susurra.
Lucía, rumana de 44 años, tiene cinco hijos y 24 nietos. La mitad viven en el poblado chabolista de El Gallinero. La mujer comparte su chabola de dos camas con su marido y cuatro nietos. Su casa es de las pocas con paredes de ladrillo. Lucía no quería madera para evitar incendios como los de otras casas. "Tengo miedo del fuego", susurra.GORKA LEJARCEGI

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