Garrafón por escocés
Detenido un empresario hotelero por rellenar botellas de JB y Ballantine's con whisky de ínfima calidad
El garrafón que bares y discotecas ofrecen a clientes incautos no surge de la nada. Hay laboratorios clandestinos donde se mezclan diferentes clases de alcohol, se rellenan botellas y, en definitiva, se intenta dar gato por liebre. Uno de esos centros de producción del garrafón ha sido desarticulado en Badalona (Barcelona). J. H. F., responsable de dos hoteles en la zona, ha sido detenido por la Guardia Civil por recoger botellas vacías de las marcas de whisky escocés JB y Ballantine's y rellenarlas con whisky de peor calidad.
El empresario hotelero, con ayuda de dos operarios, visitaba grandes superficies para comprar marcas de whisky poco conocidas y de bajo precio. De forma paralela, recogían botellas de las populares JB y Ballantines en contenedores de basura y en puntos de reciclaje. En el almacén de Badalona, los tres hombres vaciaban las botellas de baja calidad e introducían el líquido (mezclado con agua destilada) en las marcas comerciales. Para que el producto resultase lo más parecido posible, mezclaban varios tipos de whisky de varias tonalidades. También utilizaban los precintos de las botellas para burlar los sistemas de seguridad antifraude.
Los agentes hallaron, en el registro del laboratorio, más de 50 botellas ya rellenadas y casi 1.000 envases vacíos, preparados para el trueque, además de un bidón con 50 litros de alcohol. El hostelero y sus operarios están imputados por los delitos de estafa, contra la salud pública, contra la Hacienda pública y contra la propiedad industrial.
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