"Preferimos saber que está muerta a no saber qué ocurrió"
Los padres de la pequeña Madeleine afirman en una revista británica que "la incertidumbre" es el peor tipo de "limbo"
La madre de Madeleine McCann ha admitido en una entrevista que se publicará mañana, martes, en la revista inglesa Woman's Own que prefiere tener que enfrentar la "terrible verdad" de que su hija esté muerta a vivir con la incertidumbre de no saber lo que le ocurrió, aunque reconoce que no consigue prepararse para malas noticias.
Estas declaraciones, recogidas hoy en varios diarios británicos, son las primeras en las que Kate McCann admite la posibilidad de que su hija, desaparecida en el Algarve hace 102 días, pueda estar muerta, después de que la semana pasada tanto ella como su marido Gerry insistieran en que estaban convencidos de que Madeleine estaba viva.
"Nunca me gustó la incertidumbre. Ese es el peor tipo de limbo. Gerry y yo hablamos sobre esto y, en nuestros corazones, ambos preferimos saber qué ocurrió, aunque eso signifique tener que enfrentarse a la verdad terrible de que Madeleine pueda estar muerta", ha afirma Kate en la entrevista.
Sin embargo, la madre de la pequeña Maddie confiesa que no consigue prepararse para recibir malas noticias. "Simplemente, no sé cómo", ha relatado.
La policía ya baraja la posibilidad
Este cambio de discurso coincide con la confirmación por parte de la Policía Judicial portuguesa de que está siguiendo una nueva línea de investigación en la que la tesis de que Madeleine está muerta ha ganado fuerza sobre la hipótesis del rapto. "En los últimos días se han producido algunos acontecimientos, han surgido algunas pistas que apuntan a una posible muerte de la niña", afirmaba el portavoz de la PJ, Olegario de Sousa, a la televisión británica BBC.
Los padres, "la llave del misterio"
Por otro lado, el rotativo luso Diario de Noticias insiste hoy en que la Policía sigue apretando el cerco sobre los amigos del matrimonio McCann, "con la convicción de que en ellos está la llave de todo el misterio" que envuelve la desaparición de Madeleine el pasado 3 de mayo en la Praia da Luz, en el Algarve.
El periódico indica que en este momento los amigos que estaban de vacaciones con la familia McCann son "apenas testigos" en este proceso, pero que si se confirma que las muestras de sangre encontradas en el apartahotel de los McCann son de Madeleine, éstos volverán a ser interrogados por las autoridades, "lo que deberá ocurrir esta semana", aseguran.
Además, el diario indica que fuentes cercanas al proceso admiten que "el cuerpo de Madeleine no habría sido enterrado, incluso porque quien pretendiese ocultarlo no tendría el material adecuado". "Quien pretendiese ocultar el cadáver no lo enterraría en aquella zona porque el arenal tiene poca profundidad y rápidamente quedaría descubierto", por ello, argumenta la referida fuente, "gana cada vez más consistencia la hipótesis de que el cuerpo fue lanzado al mar en un saco con piedra, para que se mantuviese en el fondo", explica el periódico.
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