Detectada una grieta en el transbordador 'Endeavour' tras su llegada a la Estación Espacial Internacional
La fisura mide unos 19,3 centímetros cuadrados
La Agencia Espacial Estadounidense (NASA) descubrió una preocupante grieta en el transbordador Endeavour poco después de que éste llegara a la Estación Espacial Internacional. La grieta podría deberse al hielo que se desprendió del tanque de combustible un minuto después del despegue.
La grieta, de unos 19,3 centímetros cuadrados, fue detectada a través de una fotografía tomada por la tripulación de la estación espacial poco después de que la nave se acoplara.
El jefe del equipo a cargo de la misión, John Shannon, declaró no saber todavía lo que puede significar este problema o las consecuencias que podría tener. "Si la grieta es lo suficientemente profunda, los astronautas del transbordador podrían tener que repararla", añadió.
El próximo domingo, los astronautas revisarán la zona, usando el brazo robótico de 30 metros de longitud de la nave y una extensión equipada con rayos láser que permitirán medir el tamaño y la profundidad exactas de la grieta, dijo Shannon, tras lo que se determinará si el daño es lo suficientemente grave como para hacer necesaria su reparación.
La fisura, de color blanco entre los mosaicos térmicos negros de la parte inferior del Endeavour, se encuentra a varios metros de distancia de la puerta principal del tren de aterrizaje. La principal hipótesis apunta que el daño se produjo por el hielo desprendido, aunque los ingenieros de vuelo barajan también la posibilidad de que se produjera por el desprendimiento de la espuma aislante del tanque de combustible externo.
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