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El PP acepta las uniones homosexuales pero rechaza el matrimonio y la adopción

Los populares concretan su postura tres meses después de que se aprobara en el Congreso el proyecto no de ley

En vísperas del Congreso Nacional del partido, el PP ha marcado su línea en referencia a las parejas homosexuales. El portavoz, Eduardo Zaplana, se ha mostrado a favor de reconocer a las uniones de gays y lesbianas los mismos derechos del matrimonio, aunque sigue rechazando las bodas homosexuales y el derecho a la adopción.

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Según ha anunciado Zaplana, su partido presentará una iniciativa parlamentaria para la regulación "moderada" de "estas formas de convivencia" frente a lo que llama la "propuesta radical" del Gobierno, que ya ha iniciado el proceso para legalizar los matrimonios entre personas del mismo sexo. Con esta postura, el PP no se desmarca ni un ápice de la Iglesia Católica, que ya expresó su opinión en contra del matrimonio de homosexuales, aunque sí a favor de la regulación legal de estas parejas.

La propuesta del PP permitiría a las parejas homosexuales establecer únicamente vínculos legales en materia fundamentalmente económica y patrimonial, como pensión de viudedad, permisos laborales o efectos fiscales. Los populares proponen que las parejas homosexuales puedan inscribirse en el Registro Civil como unión civil estable para poder tener derecho a pensión de viudedad, excedencias, permisos laborales, reducción de jornada, quince días de vacaciones por formalizar la unión y a hacer declaración conjunta del IRPF.

Una propuesta "avanzada"

Zaplana ha afirmado que la propuesta de su grupo es "avanzada" y debido a su "carácter centrado" será aceptada por la mayoría de la sociedad, mientras cree que los españoles se muestran en contra de una medida que consideran radical por parte del Gobierno. Pese a la opinión de Zaplana, el barómetro del CIS (Centro de Investigaciones Sociales) con datos de junio, revela que el 66,2% de los españoles es partidario de que los homosexuales puedan casarse, es decir, dos de cada tres.

El pasado día 29 de junio, la mayoría del Congreso aprobó la proposición no de ley del PSOE por la que se insta al Gobierno a regular el matrimonio de gays y lesbianas en la que el PP fue el único grupo que votó en contra (CiU dio libertad de voto a sus diputados). En ese momento, algunos grupos parlamentarios recriminaron al PP que aún no tuviera conformada su propuesta al respecto de este tema. La decisión llega tres meses después y en vísperas del Congreso Nacional del PP que ratificará a Mariano Rajoy como nuevo líder.

Desde el PSOE, el diputado Jordi Pedret ha rechazado la propuesta del PP por considerar que se basa en un concepto "confesional y antiguo" del matrimonio y que tiene como objetivo evitar que las personas del mismo sexo se casen. Pedret ha subrayado que el PSOE habría votado favorablemente a la iniciativa del PP si los populares "se hubieran despertado a tiempo" y la hubieran presentado junto con las iniciativas que el Pleno acordó tramitar en junio. En cualquier caso, ha dado la "bienvenida" al PP por "reconocer que se había equivocado anteriormente". Por su parte, la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGT) la ha calificado de "oferta de fin de semana congresual". Para Beatriz Gimeno, presidenta de FELGT, la iniciativa es además una muestra de "hipocresía política de un partido que se ha caracterizado por su homofobia".

Zaplana y Rajoy, durante la reunión preparatoria del Congreso del partido.
Zaplana y Rajoy, durante la reunión preparatoria del Congreso del partido.EFE

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