La plaga de langosta devora más de un millón de hectáreas de terrenos cultivables en Mauritania

La plaga de langosta que asola Mauritania desde hace cuatro días ha causado hasta el momento la destrucción de más de un millón de hectáreas de terrenos cultivables, según ha informado el ministro mauritano de Agricultura, Mohamed Abdalahi Uld Babah, citado por la agencia misionera de noticias MISNA. El azote de la langosta ha agravado la ya de por sí catastrófica situación alimentaria que arrastra el país debido a la sequía endémica, por lo que un millón de personas podría morir de hambre.

Ubicada en el noroeste del continente africano, Mauritania tiene una extensión de 1.030.000 kilómetros cuadrados, de los que 677.000 son desierto. Según el ministro, la estimación inicial de 800.000 hectáreas difundida hace menos de 48 horas ya se ha visto superada por la gravedad de la plaga.

Por ello, ha insistido en la necesidad de que lleguen las ayudas de la comunidad internacional, a la cual ya pidió hace unos días el envío de equipos especializados en pesticidas y de un millón de litros de productos fitosanitarios, frente a los 120.000 de que dispone en la actualidad el Gobierno de Nouakchott.

La peor invasión en 15 años

Hasta la fecha, sólo Argelia ha respondido al llamamiento con el envío de dos equipos. En total, la langosta ha arrasado casi ocho millones de hectáreas de terreno cultivable en varios países del África Occidental. Los expertos coinciden en señalar que la invasión de este año es excepcional por su gravedad, y algunos ya la comparan con la que se produjo a finales de los años 80, cuando una gigantesca plaga de langosta se extendió desde Sudán occidental hasta India, atravesando 28 países.

A principios del pasado mes de julio, la Organización para la Alimentación y la Agricultura de la ONU (FAO) levantó la alarma de que se acercaba una fuerte plaga de langosta en Africa y destacó que los insectos ya habían salido de sus lugares de reproducción en África Noroccidental y se extenderían por Mauritania, Senegal, Mali, Nigeria y Chad, y posiblemente por Sudán y Gambia.

Según la FAO, la de este año es la "peor invasión de langostas de los últimos 15 años". La langosta del desierto es un animal por lo general solitario que, en presencia de condiciones meterológicas favorables -por ejemplo, la abundancia de lluvias-, tiende a formar enjambres de varios kilómetros de extensión que contienen decenas de millones de insectos.