El Gobierno aprueba la ley que pretende acabar con las diferencias sanitarias entre comunidades

El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el anteproyecto de ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud, cuyo objetivo es reforzar la equidad, calidad y participación del sistema sanitario, y que sitúa al ciudadano como "eje" del mismo.

La ley establece la implantación de una tarjeta sanitaria unificada, prevé que habrá plazos máximos en las listas de espera y amplía el catálogo de prestaciones a la atención paliativa para enfermos terminales, la salud bucodental y la mental. También plantea la libre elección de médico y más habitaciones individuales en los hospitales.

En conferencia de prensa, la titular de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, ha dicho que la nueva norma, que se remite a las Cortes, "viene a dar forma al derecho a la protección de la salud, una vez completada la descentralización a todas las Comunidades Autónomas".

"Se pretende un sistema armónico, en un marco de cohesión y cooperación, que preserve el acceso al sistema sanitario en igualdad efectiva de condiciones, y con garantías en tiempo, accesibilidad y movilidad", ha dicho la ministra, quien ha añadido que habrá una tarjeta sanitaria individual para todo el Estado y que permita "moverse en Europa".

Los ciudadanos, según recoge la Ley, tienen derecho a disfrutar de las mismas prestaciones sanitarias, con las mismas garantías de accesibilidad, tiempo, información, seguridad y calidad, y con independencia de su lugar de residencia en el territorio nacional. "El ciudadano es el eje de esta ley. Hay que preservar el derecho de todos los ciudadanos, independientemente de su lugar de residencia, a acceder a los mismos servicios en igualdad y con calidad", ha afirmado la ministra.

Para ello, la norma prevé la creación de una tarjeta sanitaria única para todo el territorio nacional. Con este nuevo documento, que acredita determinados datos del titular, se facilita el acceso de los ciudadanos a las prestaciones de la atención sanitaria que proporciona el SNS.

Sin perjuicio de su gestión en el ámbito territorial por cada CC AA, las tarjetas incluirán los datos básicos de identificación del titular de la tarjeta, del derecho que le asiste en relación con la prestación farmacéutica y del servicio de salud o entidad responsable de la asistencia sanitaria.

La ley contempla además la designación de centros de referencia para la atención de aquellas patologías cuyo abordaje precise de alta especialización profesional o elevada complejidad tecnológica, o cuando el número de casos a tratar no sea elevado.

Garantías

El anteproyecto trata de impedir que se generen diferencias de atención sanitaria mediante el enunciado de una serie de garantías, entre las que figura el derecho a que haya plazos máximos en las listas de espera. Otra garantía es la de movilidad: el derecho a ser atendido en cualquier lugar de España en caso de desplazamiento y el de acceder a un centro alejado si no hay atención adecuada en la propia ciudad. El anteproyecto prevé la creación de servicios de referencia para atender aquellas enfermedades cuyo tratamiento deba concentrarse en unos pocos puntos. Serán financiados a cargo del fondo de cohesión, creado en diciembre pasado.