El Papa manifiesta su "vergüenza" por los casos de sacerdotes pederastas
A la misa de clausura de la JMJ acudieron unos 800.000 jóvenes de 173 países
A pesar de la lluvia, alrededor de 800.000 jóvenes han asistido en Dowsview Park, en Toronto, a la misa de clausura de la XVII Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), con la que el Papa Juan Pablo II ha terminado su visita a Canadá. Durante el discurso, Wojtyla hizo referencia a la polémica de la pederastia en la Iglesia, expresando su "profunda tristeza y vergüenza".
Durante la homilía, el Papa abordó uno de los temas más polémicos para la Iglesia Católica, especialmente en Estados Unidos y Canadá, el escándalo de los sacerdotes pederastas. Wojtyla ha pedido a los jóvenes que "estén cerca y apoyen a los sacerdotes" y que no se desanimen por "las culpas y los fallos de algunos hijos de la Iglesia". "El daño causado a personas jóvenes y frágiles nos llena a todos de una profunda tristeza y vergüenza", ha apuntado Wojtyla, recordando, no obstante, que la mayoría de los religiosos trabajan al servicio de la fe.
"Me siento un poco viejo y cansado, pero comparto vuestras esperanzas", ha afirmado Wojtyla, ante una audiencia entregada.
No faltó tampoco la alusión de Juan Pablo II a los atentados del 11 de septiembre, y señaló la necesidad de elegir entre odio y amor. "El nuevo milenio se inauguró con dos escenarios contrapuestos: el de la multitud de peregrinos llegados a Roma para cruzar la Puerta Santa y el del terrible atentado terrorista de Nueva York, símbolo de un mundo en el que parece prevalecer la dialéctica del odio", ha añadido.
El Pontífice también ha pedido a los jóvenes que no se conformen con "respuestas provisionales", dejando que la vida dependa de "impulsos instintivos, de sensaciones efímeras o de entusiasmos pasajeros".
Siguiente etapa
Con el acto multitudinario de hoy, precedido por la Vigilia de la pasada noche, a la que acudieron alrededor de 600.000 personas, el Papa pone punto final a la etapa canadiense de su viaje, que ha conseguido superar airadamente, gracias a una mejora notable de su salud, que le permitió incluso descender del avión por su propio pie a su llegada a Toronto.
Juan Pablo II ha aprovechado para anunciar que Colonia, en Alemania, será la sede de la XX Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que se celebrará en el año 2005.
Por otra parte, mañana el Pontífice inicia su visita a México y Guatemala donde todo está preparado ya para su llegada en el marco de un fuerte dispositivo de seguridad.
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