Cuando la respiración celular se ralentiza: así evitan los productos de última generación de Dior el envejecimiento de la piel

“Presenciamos un momento histórico. Podemos decir que revertir el envejecimiento es posible”, afirmaba Vittorio Sebastiano en una conferencia en la Universidad de Stanford el pasado octubre. Profesor titular en esta institución californiana, es pionero en el campo de la reprogramación celular: “Lo creemos porque se ha trazado el mapa del envejecimiento y un mapa es imprescindible para ir a un destino, pero también para volver”. El investigador elevaba las apuestas en una entrevista tras su ponencia: “Conceptual y teóricamente no hay razón para pensar que en un futuro alcancemos los 150 años. No creo que sea biológicamente imposible, por la actuación sinérgica de muchos avances: generar nuevos órganos, intervenciones en la dieta, mejores medicinas, los senolíticos, reprogramación… Dicho esto, no es necesariamente una buena idea. Sobre todo porque hay mucho que ya sabemos y no hacemos. La obesidad infantil, la dieta, el ejercicio… Las nuevas fronteras de la medicina nos brindarán oportunidades para tratar enfermedades relacionadas con el envejecimiento, pero si no hacemos muchas otras cosas, no tiene sentido algo tan sofisticado. No se trata de cuánto se vive, sino cómo. Tenemos que garantizar que las personas no se vuelvan frágiles”.

En ese mapa del envejecimiento una parada destacada son las células madre, clave en la regeneración de los tejidos: “Son capaces de forjar nuevas células”, prosigue el profesor, “solo que el proceso se ralentiza. Pero si podemos proveerlas con el medio y los nutrientes necesarios, eso podría significar rejuvenecimiento”. Hay varios elementos fundamentales para darles un ambiente ideal, pero son esenciales una correcta aportación de oxígeno y la eliminación de las células zombis o senescentes, aquellas que, aunque dejan de dividirse y funcionar correctamente, no son descartadas como se debiera. Para acabar con estas últimas el cuerpo está armado con las células NK (natural killers, algo así como asesinas naturales), pero con el paso de los años su labor se frena en un dominó de efectos adversos.

La ciencia comienza a desenredar la madeja, como revela David Furman, doctor en bioquímica humana y director de The Stanford 1000 Immunomes Project: “Las células NK son un componente del sistema inmunitario, podría decirse que la primera línea de defensa porque se encargan de limpiar a las células senescentes, pero también a las células tumorales. Se infiltran en los tejidos, se pueden encontrar en el hígado o en la piel. El problema es que son dependientes del oxígeno. Con el tiempo este proceso de matar se ralentiza y creemos que una de las razones es la no disponibilidad de suficiente oxígeno para la respiración celular”.

Estas investigaciones que afectan a diversos órganos, incluida la piel, no se traducen directamente en cremas, pero los avances evolucionan el campo de la cosmética. De ahí la alianza de Dior con científicos de todo el mundo en su panel Reverse Aging Board, del que forman parte tanto Sebastiano como Furman. Este último lo explica así: “La colaboración es espontánea, buscando áreas tangentes de estudio que ponemos en común. Una polinización cruzada que es interesante tanto para Dior como para nosotros”. Para el último lanzamiento de la casa, la reformulación de la gama Capture enriqueciéndola con el complejo OX-C (desarrollado por Dior para potenciar el correcto suministro de oxígeno a las células y favorecer la labor de las NK), él se ha encargado de testarlo: “En mi laboratorio probamos diferentes compuestos, incluido el OX-C, sobre células senescentes que incubamos durante 24 horas junto a células NK. El tratamiento con OX-C, en comparación a los demás, fue capaz de aumentar en un 84% la actividad de las NK, lo que supone un hito en la regeneración de la piel”.

“Con cada reformulación partimos de la tecnología anterior y la enriquecemos con las nuevas investigaciones”, apunta Bruno Bavouzet, presidente de investigación en LVMH. “En este caso nos hemos centrado en el oxígeno, activando su transportador, al entender que el mecanismo de respiración celular está involucrado en las diferencias entre las células madre de una persona mayor y de una joven”. Una traducción de los avances de la medicina regenerativa en productos para el uso diario; o de algunos avances, porque el campo es imparable y ya tiene múltiples en marcha, lo que muy probablemente marcará el futuro de la cosmética de la próxima década.