Nike patenta unas zapatillas basadas en ‘blockchain’
La multinacional estadounidense ha presentado su idea de asociar activos criptográficos a algunas de sus deportivas para que sus usuarios puedan comprar y vender sus zapatillas digitales
Si te has quedado con la idea de que blockchain es simplemente la tecnología que ha hecho posible bitcoin, te queda mucho por aprender. La marca deportiva Nike ha patentado la idea de unas zapatillas compatibles con la cadena de bloques, que ha bautizado como CryptoKicks. Con esta iniciativa, la compañía busca combatir las falsificaciones, pero también pretende conseguir un mayor implicación de sus clientes con la marca y podría servirle de ayuda en el diseño creativo de nuevos modelos.
El sistema que ha definido Nike se basa en unir un producto físico —el calzado deportivo— con activos criptográficos o tokens, que se crearían en la blockchain de Ethereum. En resumen, cada par de CryptoKicks lleva consigo un activo digital con un identificador único de las zapatillas.
Según explica el documento —presentado en la oficina de patentes de EE UU en abril, pero otorgada el pasado 10 de diciembre—, cuando un consumidor compra un par de zapatos, debe escanear el código de barras que se encuentra en la caja a través de una aplicación móvil.
Para desbloquear el token, es necesario vincular el código de identificación de la zapatilla —una clave de 10 dígitos— con el de su propietario. De esta forma se asegura la autenticidad del producto y se garantiza al cliente que no está frente a una falsificación. También puede resultar de utilidad para que la compañía pueda llevar a cabo campañas promocionales para los usuarios de CryptoKicks. En un evento deportivo, por ejemplo, Nike podría regalar complementos para las deportivas digitales de los asistentes que las tengan.
Gracias a esta tecnología, la multinacional también es capaz de rastrear la propiedad de las zapatillas en caso de que cambien de dueño. Si las deportivas se venden a otra persona, su propiedad digital puede transferirse con el intercambio del calzado y los tokens asociados, ya que estos activos digitales pueden almacenarse en una billetera de criptomonedas.
Nike describe así el potencial de esta solución tecnológica para luchar contra las falsificaciones: “Un usuario puede comprar un nuevo par de zapatillas a un proveedor verificado que puede proporcionar registros de procedencia autenticados de las mismas”.
- La fiebre de la reventa de zapatillas
El aumento de los controles sobre la autenticidad de las zapatillas que supone esta patente es un movimiento de increíble valor estratégico para Nike. Desde hace una década, su sector ha visto como la reventa de zapatillas deportivas en edición limitada —y un subconjunto de productos asociados a la cultura urbana— alcanzaba cifras astronómicas.
El mercado de segunda mano de estos productos mueve varios miles de millones de euros al año y la especulación ha permitido proliferar a plataformas digitales como StockX o Klekt, que funcionan como mercados de valores. En estas páginas, los coleccionistas pueden consultar las pujas máximas y mínimas que se hacen por cada zapatilla para comprarlas por precios que, en ocasiones, superan las cuatro cifras.
El certificado de autenticidad que provee la cadena de bloques puede servir para consolidar el sistema de reventa actual incrementando la confianza que los compradores depositan en los mercados de segunda mano y añadiendo, de paso, el concepto de edición limitada que tanto dispara los precios. En el mundo solo existirá una zapatilla digital como la tuya. ¿Cuánto estarías dispuesto a pagar por ella?
Con esta iniciativa, la empresa pretende automatizar la generación de activos criptográficos asociados a artículos de calzado o archivos de diseño digital representativos de los mismos. Su solicitud describe un mercado online de ropa y calzado en el que los usuarios “puedan extraer, ganar, comprar, recibir, almacenar y transferir tokens, criptomonedas y otras soluciones basadas en blockchain”.
La propuesta de Nike no termina aquí. La patente añade que los propietarios de las CryptoKicks podrán comprar y vender sus zapatillas digitales, pero también juntarlas con las de otra persona para que se reproduzcan y tengan una suerte de descendencia de zapatos. Es inevitable pensar que la compañía haya podido tomar esta idea de CryptoKitties, un popular videojuego online basado en la cadena de bloques que permite a sus jugadores comprar, vender, criar y coleccionar gatos virtuales.
En este sentido, es interesante recordar que cada token se compone de un conjunto de datos sobre el color, estilo y material de la zapatilla digital, por lo que cada una de ellas es diferente. La compañía podría aprovechar la ingeniería genética artificial resultante de las mezclas entre diferentes zapatillas digitales como inspiración para diseñar nuevos modelos de calzado deportivo.
La compañía también describe en su patente la posibilidad de que la CryptoKick virtual cobre vida de alguna manera y, al estilo del histórico Tamagochi, su propietario pueda guiarla en su proceso de evolución desde recién nacida hasta adulta pasando por su etapa adolescente, desbloqueando diferentes zapatillas físicas en cada etapa del proceso. Nike llega a valorar que la deportiva virtual pueda hacerse un hueco en determinados universos digitales como complemento para personajes de videojuego.
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